Conectarse
Últimos temas
~El Staff~
Nuestros Afiliados.
Relajado (Privado Arthur)
2 participantes
Página 1 de 1.
Relajado (Privado Arthur)
- HAHAHAHAHA! - reía gustosamente el americano mientras sentía el viento golpear su rostro con fuerza que hacía que sus sus rubios cabellos volasen llevándolos todos hacia atrás.... se sentía volar.
¿Qué rayos estaba haciendo ahora....?
Una de las cosas que más amaría por hacer, aparte de volverse una super-estrella de cine de acción o conocer a un UFO de verdad o romper su propio record en comer hamburguesas, era volar. Amaba lo amplio y enorme que era el cielo azul, amaba sentir el viento correr con fuerza, ese sentimiento de libertad, pero sobre todo, amaba ver el verde de la tierra que había dejado atrás y se encontraba a kilómetros de distancia de él haciéndolo sentir alto y omnipotente... ¿esto a qué tiene que ver con lo que realmente hacía? Bueno, pues al "héroe" se le ocurrió la grandiosa idea de patrullar el lugar "volando".... o por lo menos sintiéndose hacerlo.
Se encontraba con las manos extendidas, cerrando ligeramente los ojos, por un moemnto disfrutaba de la tranquilidad del momento. Y la verdad es que....¡no estaba del todo mal! Le recordaba a la escena del Titanic, sin embargo, por suerte o por desgracia...¿DÓNDE ESTABA SU PRECIOSA Y PERFECTA DAMA? Un héroe necesita a una damisela a la que cuidar pero por desgracia, aun...no tenía ninguna
Aquello era todo mucho más divertido que cualquier reunión aburrida de las de siempre, con todos los profesores, donde TODOS le echaban en cara lo que hacia.
Intentaba recordar internamente ¿Qué hacía mal "siempre"? Todas las reuniones eran iguales, le gritaban porque comía en medio de la reunión, le llamaban la atención por armar torres de cartas cuando se aburría por lo que decian los otros, porque se dormía en las que contenían un alto índice de somnífero en la voz de los demás profesores, porque escuchaba música ¡¿Es que ahora la música es un crimen?!, porque llegaba tarde al estar cumpliendo con sus misiones heróicas, porque se salía a mitad de ellas para cumplir sus misiones heróicas, por tararear, por leer revistas y sin ser las porno, por ver comics, por dibujar una "encantadora" caricatura de algunos de por participantes, por tirarle papeles al profesor de al lado, por hablar interrumpiendo a los demás,.... y la lista continuaba. Incluso decian que en ocasiones parecía un alumno.¡No lo era!
Eran tantas las ocasiones que había sido consecutivamente amonestado que la gran mayoría de las razones las había olvidado ¿Es qué nunca podía tener una reunión sin que se quejaran de él? ¿Qué los demás eran tan idiotas que no se daban cuenta que no se daban cuenta de la inutilidad de lo que decian?
Así que para salir de aquella rutina taaaaaaaaan aburrida, decidió quedarse allí traquilo, pero había algo apoyado en un arbol.
Pan suave y blanco por dentro, crocante y cobrizo por fuera con una encantadora decoración a ajonjolíes que le hacía parecer como escarcha. Doble queso. Lechuga fresca. Tomates. Cebollas. Mostaza y Ketchup. Pepinillos. Y, obviamente lo más importante y más sabroso de todo, un grueso y suculento pedazo de carne cocinado en plancha y aceite. Todo esto guardado dentro de una especie de plástico que grababa la ya más que conocida publicidad de la letra "M" curveosa y amarillosa en un fondo rojoso.
Que dentro de poco sería saboreado por el americano cuando dejará de hacer...¿el tonto?
¿Quién podía decir que semejante lugar, fuera taaaaaaaan relajante? Al heroe la verdad le iba más la acción, sin duda, hacer grandes hazañas, como,acabar con el hambre en el mundo, destruir comunistas, incluso hacer una tortilla con huevos, pero huevos kinder . ¡Cosas qu hacia falta mucho valor para hacer!. El agradable día que se llevaba fue lo que le llamó entero su atención. Tragó aquella bola de comida de puras calorías que llevaba masticando unos segundos antes y contempló la vista.
Lo mejor de todo aquello es que si alguien venía podía decir que estaba patrullando por si algún astuto y travieso alumno iba por ahí y se perdía ayudarlo, of course.
¿Qué rayos estaba haciendo ahora....?
Una de las cosas que más amaría por hacer, aparte de volverse una super-estrella de cine de acción o conocer a un UFO de verdad o romper su propio record en comer hamburguesas, era volar. Amaba lo amplio y enorme que era el cielo azul, amaba sentir el viento correr con fuerza, ese sentimiento de libertad, pero sobre todo, amaba ver el verde de la tierra que había dejado atrás y se encontraba a kilómetros de distancia de él haciéndolo sentir alto y omnipotente... ¿esto a qué tiene que ver con lo que realmente hacía? Bueno, pues al "héroe" se le ocurrió la grandiosa idea de patrullar el lugar "volando".... o por lo menos sintiéndose hacerlo.
Se encontraba con las manos extendidas, cerrando ligeramente los ojos, por un moemnto disfrutaba de la tranquilidad del momento. Y la verdad es que....¡no estaba del todo mal! Le recordaba a la escena del Titanic, sin embargo, por suerte o por desgracia...¿DÓNDE ESTABA SU PRECIOSA Y PERFECTA DAMA? Un héroe necesita a una damisela a la que cuidar pero por desgracia, aun...no tenía ninguna
Aquello era todo mucho más divertido que cualquier reunión aburrida de las de siempre, con todos los profesores, donde TODOS le echaban en cara lo que hacia.
Intentaba recordar internamente ¿Qué hacía mal "siempre"? Todas las reuniones eran iguales, le gritaban porque comía en medio de la reunión, le llamaban la atención por armar torres de cartas cuando se aburría por lo que decian los otros, porque se dormía en las que contenían un alto índice de somnífero en la voz de los demás profesores, porque escuchaba música ¡¿Es que ahora la música es un crimen?!, porque llegaba tarde al estar cumpliendo con sus misiones heróicas, porque se salía a mitad de ellas para cumplir sus misiones heróicas, por tararear, por leer revistas y sin ser las porno, por ver comics, por dibujar una "encantadora" caricatura de algunos de por participantes, por tirarle papeles al profesor de al lado, por hablar interrumpiendo a los demás,.... y la lista continuaba. Incluso decian que en ocasiones parecía un alumno.¡No lo era!
Eran tantas las ocasiones que había sido consecutivamente amonestado que la gran mayoría de las razones las había olvidado ¿Es qué nunca podía tener una reunión sin que se quejaran de él? ¿Qué los demás eran tan idiotas que no se daban cuenta que no se daban cuenta de la inutilidad de lo que decian?
Así que para salir de aquella rutina taaaaaaaaan aburrida, decidió quedarse allí traquilo, pero había algo apoyado en un arbol.
Pan suave y blanco por dentro, crocante y cobrizo por fuera con una encantadora decoración a ajonjolíes que le hacía parecer como escarcha. Doble queso. Lechuga fresca. Tomates. Cebollas. Mostaza y Ketchup. Pepinillos. Y, obviamente lo más importante y más sabroso de todo, un grueso y suculento pedazo de carne cocinado en plancha y aceite. Todo esto guardado dentro de una especie de plástico que grababa la ya más que conocida publicidad de la letra "M" curveosa y amarillosa en un fondo rojoso.
Que dentro de poco sería saboreado por el americano cuando dejará de hacer...¿el tonto?
¿Quién podía decir que semejante lugar, fuera taaaaaaaan relajante? Al heroe la verdad le iba más la acción, sin duda, hacer grandes hazañas, como,acabar con el hambre en el mundo, destruir comunistas, incluso hacer una tortilla con huevos, pero huevos kinder . ¡Cosas qu hacia falta mucho valor para hacer!. El agradable día que se llevaba fue lo que le llamó entero su atención. Tragó aquella bola de comida de puras calorías que llevaba masticando unos segundos antes y contempló la vista.
Lo mejor de todo aquello es que si alguien venía podía decir que estaba patrullando por si algún astuto y travieso alumno iba por ahí y se perdía ayudarlo, of course.
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
-Bloody Hell.- era ya la quinta vez que maldecía su suerte. Se encontraba en medio del bosque con mucha hambre, la ropa toda sucia y el tobillo derecho lastimado.
¿Por qué?
-Flash Back-
Se dirigía a su habitación después he haber estado “revisando unos papeles” con el rector. Tenía todo su cuerpo adolorido, solo quería llegar a su habitación, que gracias a ser el líder del dormitorio era individual, ducharse y tirarse en su cama para no saber del mundo hasta mañana.
-Fuck!- su cuerpo le dolía como los mil demonios. Entro al baño para luego desvestirse, miro su reflejo en el espejo… lo que veía no le gustaba. Vio a un joven delgado y de rubio cabello. La piel de su torso era pálida y estaba cruzada por una gran cantidad de cicatrices y moretones, unos más recientes que otros. Ese sucio cuerpo no era más que el resultado del “amor que le daba su rector.
Alejando esos pensamientos de su cabeza se metió en la ducha, sentía el agua fría caer sobre su cuerpo como si lo estuvieran acribillando con miles de agujas.
Salio de la ducha secándose el cabello y ahí fue cuando se percato de cierto papel que estaba sobre su velador. Secó sus manos y lo tomo cuidadosamente para leerlo.
“Querido Arty, necesito que nos juntemos en el gran roble del bosque a las seis. Te pido que nos juntemos ahí ya que se que no te gusta que te hablemos en la escuela
¡No vayas a faltar!
Holly”
-Shit, cuantas veces le he dicho que no me llame así. Mmm… ¿a las seis?- dirigió su mirada al reloj que estaba sobre el velador.- Bloody Hell! Fuck! Fuck! ¡Son las seis menos quince!- se vistió apresurado y corrió hacia el lugar de encuentro.
Se encontraba en el lugar del encuentro pero no veía a Holly.
-¡Holly! ¡Holly! ¿Dónde estas?- llamaba al hada, pero no escuchaba respuesta alguna, hasta que escucho unos sonidos provenir del otro lado del bosque.- ¿Holly? ¿Eres tú?- Se dirigió al lugar de donde provenían los sonidos; tras unos arbustos. Sintió que los sonidos se alejaron así que corrió tras ellos. Mala idea, no contó con el hecho de que entre los arbustos hubiera una piedra, es más no contó con el hecho de que la pisaría provocando que cayera de manera muy brusca al suelo.
-Auchhhh… genial, lo que me faltaba- murmuro con ironía. Intento parase pero un punzante dolor en su tobillo derecho se lo impidió.
-Hai, hai…dolor- puso su mano sobre su tobillo- Bloody Hell.- Después de varios intentos fallidos logró ponerse de pie y se dirigió por donde el creía que estaba la salida. Genial, no podía ser mejor ahora se encontraba en medio del bosque, todo sucio y con un tobillo lastimado.
-Fin Flash Back-
-¡ARGGGHH MALDICION!- se quejo por ya por décima vez. Creyó escuchar a alguien hablar, así que se acerco al lugar de donde provenía una voz.
Ahí fue cuando lo vio.
Buen porte, ojos azules como el cielo cubiertos por unos anteojos y cabello de un rubio oscuro. Ese era Alfred F. Jones, su profesor de ética.
No se llevaba muy bien con él, detestaba su manera infantil e inmadura de ser, sus gritos y chillidos hacían que su cabeza casi explotase, el que lo molestara tratándolo de igual (aun no lo insultaba por el hecho de que era un profesor, pero las ganas no les faltaban). Todas esas y muchas otras cosas le molestaban de él, aunque muy en el fondo le gustaba su manera liberal de ser, ese sentido utópico de bien que tenia, la energía que lo rodeaba… ¡Rayos! Ya estaba pensando demás.
Decidió que lo mejor seria alejarse del lugar, ya tenía bastante y realmente no estaba de humor como para que un gordo yankee se riera de su suerte.
Pero definitivamente la suerte no estaba de su lado, en el momento que retrocedía se tropezó con la raíz de un árbol cayendo estruendosamente al piso.
-Haaa…-definitivamente hoy no era su día.
¿Por qué?
-Flash Back-
Se dirigía a su habitación después he haber estado “revisando unos papeles” con el rector. Tenía todo su cuerpo adolorido, solo quería llegar a su habitación, que gracias a ser el líder del dormitorio era individual, ducharse y tirarse en su cama para no saber del mundo hasta mañana.
-Fuck!- su cuerpo le dolía como los mil demonios. Entro al baño para luego desvestirse, miro su reflejo en el espejo… lo que veía no le gustaba. Vio a un joven delgado y de rubio cabello. La piel de su torso era pálida y estaba cruzada por una gran cantidad de cicatrices y moretones, unos más recientes que otros. Ese sucio cuerpo no era más que el resultado del “amor que le daba su rector.
Alejando esos pensamientos de su cabeza se metió en la ducha, sentía el agua fría caer sobre su cuerpo como si lo estuvieran acribillando con miles de agujas.
Salio de la ducha secándose el cabello y ahí fue cuando se percato de cierto papel que estaba sobre su velador. Secó sus manos y lo tomo cuidadosamente para leerlo.
“Querido Arty, necesito que nos juntemos en el gran roble del bosque a las seis. Te pido que nos juntemos ahí ya que se que no te gusta que te hablemos en la escuela
¡No vayas a faltar!
Holly”
-Shit, cuantas veces le he dicho que no me llame así. Mmm… ¿a las seis?- dirigió su mirada al reloj que estaba sobre el velador.- Bloody Hell! Fuck! Fuck! ¡Son las seis menos quince!- se vistió apresurado y corrió hacia el lugar de encuentro.
Se encontraba en el lugar del encuentro pero no veía a Holly.
-¡Holly! ¡Holly! ¿Dónde estas?- llamaba al hada, pero no escuchaba respuesta alguna, hasta que escucho unos sonidos provenir del otro lado del bosque.- ¿Holly? ¿Eres tú?- Se dirigió al lugar de donde provenían los sonidos; tras unos arbustos. Sintió que los sonidos se alejaron así que corrió tras ellos. Mala idea, no contó con el hecho de que entre los arbustos hubiera una piedra, es más no contó con el hecho de que la pisaría provocando que cayera de manera muy brusca al suelo.
-Auchhhh… genial, lo que me faltaba- murmuro con ironía. Intento parase pero un punzante dolor en su tobillo derecho se lo impidió.
-Hai, hai…dolor- puso su mano sobre su tobillo- Bloody Hell.- Después de varios intentos fallidos logró ponerse de pie y se dirigió por donde el creía que estaba la salida. Genial, no podía ser mejor ahora se encontraba en medio del bosque, todo sucio y con un tobillo lastimado.
-Fin Flash Back-
-¡ARGGGHH MALDICION!- se quejo por ya por décima vez. Creyó escuchar a alguien hablar, así que se acerco al lugar de donde provenía una voz.
Ahí fue cuando lo vio.
Buen porte, ojos azules como el cielo cubiertos por unos anteojos y cabello de un rubio oscuro. Ese era Alfred F. Jones, su profesor de ética.
No se llevaba muy bien con él, detestaba su manera infantil e inmadura de ser, sus gritos y chillidos hacían que su cabeza casi explotase, el que lo molestara tratándolo de igual (aun no lo insultaba por el hecho de que era un profesor, pero las ganas no les faltaban). Todas esas y muchas otras cosas le molestaban de él, aunque muy en el fondo le gustaba su manera liberal de ser, ese sentido utópico de bien que tenia, la energía que lo rodeaba… ¡Rayos! Ya estaba pensando demás.
Decidió que lo mejor seria alejarse del lugar, ya tenía bastante y realmente no estaba de humor como para que un gordo yankee se riera de su suerte.
Pero definitivamente la suerte no estaba de su lado, en el momento que retrocedía se tropezó con la raíz de un árbol cayendo estruendosamente al piso.
-Haaa…-definitivamente hoy no era su día.
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Sin duda.... debía admitir que en días como esos, el bosque era uno de los lugares más hermosos y preciosos; desde la bella vista verde, los colores de algunos pájaros cantureando, flores, las voces de la gente quejándose.... wait, ¿gente quejándose?
¡Ese era su momento de gloria! Exactly. Era el comienzo de otra de sus lindas aventuras, en la cual aquel rubio era el protagonista. Of course. ¡Como siempre! Miró hacia su alrededor como si necesitará algo. ¡NO! ¡nononononono! ¡No podía ser! No tenía su queridisima capa del McDonals, la cual haría un rescate mucho más heroico, ni una música de fondo que diera un toque más heroico, ni nadie que dijera ``Qué heroico´´ Para que fuera aún más heroico. ¡QUE POCO HEROICO! Ah, se me olvidaba, él héroe tenía que ser héroico por si no lo había comentado.
Pero aún así el heroe debería salvar a esa damisela en apuros. Por lo cual paso su manga para limpiar los restos de comida de sus labios. Daba gracias de comer tan rápido, ya que en casi 4 mordiscos como much se había comido toda una hamburguesa enorme entera, eso hacia que cuando tuviera que entrar en acción fuera mucho más rápido. Aunque mucha gente que comiera rápido lo veían como un bruto devorador pero simplemente es que un héroe debe comer deprisa para si, como en esta ocasión, alguien esta en apuros, que pueda ir a salvarlo y encima con la tripa vacía. Porque ya se sabe que salvar sin haber comido es una perdida segura contra el gran villano.
Mil ideas aparecieron por la idea de Alfred, ¿cómo sería la doncella con la que viviría su aventura al estar en apuros? ¿Rubia, morena? Eso realmente no le importaba a un héroe, ya que lo que seguro sería, era dulce, sencilla, amigable y hermosa.
Y cuando toda su ilusión, vida y demás estaban en la persona que se encontraba detrás de aquel matorral y sus expectativas cuanto menos eran, exageradas. Su rostro de ilusión y heroicidad se fueron totalmente en un instante. Esa persona no era dulce, y mucho menos una mujer. Lo recordaba, era un alumno que parecía que siempre estaba con la menstruación. Siempre aunque no le contestará en clase sabía que no le tenía mucho aprecio. Era arisco, muy arisco con todos. Para nada, podría ser tan siquiera la milesima parte de la mujer que él neceistaba. Realmente había preferido una linda doncella la cual le agradeciera y le dijera cuanto lo amaba, besarlo y tener una noche desenfrenada estilo pelicula americana en el bosque, pero no. Seguramente lo salvaría y le insultaría. ¡Pero le daba igual! ¡Porque el heroe habría hecho una buena labor! ¡Cómo tantas otras!
No es que le cayera mla ya que al fin y al cabo era solo un alumno más pero bueno, simplemente no le gustaba mucho su actitud.
Se quedo mirando al otro con cierto descaro, se veía fatigado, cansado, exhausto. El otro debía haber estado hace mucho tiempo caminando sin rumbo por todo el bosque y sobretodo yendo cayendose por todos lados, clavandose piedras, ramas, ¡lo raro sería que estuviera sin ningún rasguño! De algo había servido que el otro hubiera venido, quizás su damisela no era él, sino....alguna hermana suya linda que fuera todo lo que a él le faltaba. Sí, una rubia hermosa de ojos verdes, pero con las cejas depiladas. Ante semejantes ideas su sonrisa se ensanchó de pronto.
Extendió su mano ofreciéndole ayuda en que se levantará pero se quedo mirando el pie dle otro, seguramente le dolería la apoyarlo. Lo salvaría, debería llevarlo a la enfermería, solo habia un problema............
¡NO RECORDABA COMO LLEGAR AL INSTITUTO!
Así que el gran heroe..... también estaba perdido...
Ante semejante idea que recorrió su cabeza como un trueno se alarmó pudiendo notarse claramente en su rostor, pero intentó calmarse, pensar las cosas con cabeza frias, no tener que alarmarse tan pronto, seguramente como er aun uheroe con el mero hecho de seguir si instinto e intuiciones podrian irse ambos sin ningún problema....HAHAHAHA ¡Pues claro!
En fin, seguidamente se arrodilló para poder agarrar el cuerpo del otro, había que reconocer que era pequeño y débil, y lo peor es que aquello despertó el espiritu protector del gran heroe.
-Hahaha~¿ por qué viniste aquí? Hahaha ~mira lo que te hiciste, voy a ayudarte, el gran héroe lo hará hahahahaha~! Ok Arthiee?!~!!-dijó con chillidos.
Con su tipica voz que se clava en los oidos y se repite inumerables veces dentro de la cabeza siendo de las irritante en algunas ocasiones, sobretodo como se cogía bastante confianza como para llamarle ``Arthie´´ y no Arthur, que era su verdadero nombre, el americano sin duda era idiota, pero sabía uqe hacer para poder enrabiar al otro y de paso gastarle una broma, que seguramente para el británico fuera como mínimo de mal gusto.
Llevándolo en brazos lo dejo sobre el suelo sacando un pañuelo con la bandera americana por supuesto con una sonrisa tonta y estúpida cosida a sus labios como si no pudiera quittarse.
-quitate los pantalones voy a vendar aunque sea un poco de la pierna para que puedas andar y seguramente estes sangrando por semejante caida-dijó con aquella sonrisa inocente, no veía malicia en lo que acababa de pedirle, al fin y al cabo simplemente lo veía como un alumno, por lo que no era raro que un chico lo viera así....¿no?
De pronto hubo algo que llamo su atención, ahora que se fijaba verlo tan sumiso, débil, herido lo hacia verse...¿mejor? No, debe ser que como es un héroe el verlo así le hace sentirse ás heroico, no que tenga los ojos más hermosos que jamás hubiera visto...¿Verdad?
¡Ese era su momento de gloria! Exactly. Era el comienzo de otra de sus lindas aventuras, en la cual aquel rubio era el protagonista. Of course. ¡Como siempre! Miró hacia su alrededor como si necesitará algo. ¡NO! ¡nononononono! ¡No podía ser! No tenía su queridisima capa del McDonals, la cual haría un rescate mucho más heroico, ni una música de fondo que diera un toque más heroico, ni nadie que dijera ``Qué heroico´´ Para que fuera aún más heroico. ¡QUE POCO HEROICO! Ah, se me olvidaba, él héroe tenía que ser héroico por si no lo había comentado.
Pero aún así el heroe debería salvar a esa damisela en apuros. Por lo cual paso su manga para limpiar los restos de comida de sus labios. Daba gracias de comer tan rápido, ya que en casi 4 mordiscos como much se había comido toda una hamburguesa enorme entera, eso hacia que cuando tuviera que entrar en acción fuera mucho más rápido. Aunque mucha gente que comiera rápido lo veían como un bruto devorador pero simplemente es que un héroe debe comer deprisa para si, como en esta ocasión, alguien esta en apuros, que pueda ir a salvarlo y encima con la tripa vacía. Porque ya se sabe que salvar sin haber comido es una perdida segura contra el gran villano.
Mil ideas aparecieron por la idea de Alfred, ¿cómo sería la doncella con la que viviría su aventura al estar en apuros? ¿Rubia, morena? Eso realmente no le importaba a un héroe, ya que lo que seguro sería, era dulce, sencilla, amigable y hermosa.
Y cuando toda su ilusión, vida y demás estaban en la persona que se encontraba detrás de aquel matorral y sus expectativas cuanto menos eran, exageradas. Su rostro de ilusión y heroicidad se fueron totalmente en un instante. Esa persona no era dulce, y mucho menos una mujer. Lo recordaba, era un alumno que parecía que siempre estaba con la menstruación. Siempre aunque no le contestará en clase sabía que no le tenía mucho aprecio. Era arisco, muy arisco con todos. Para nada, podría ser tan siquiera la milesima parte de la mujer que él neceistaba. Realmente había preferido una linda doncella la cual le agradeciera y le dijera cuanto lo amaba, besarlo y tener una noche desenfrenada estilo pelicula americana en el bosque, pero no. Seguramente lo salvaría y le insultaría. ¡Pero le daba igual! ¡Porque el heroe habría hecho una buena labor! ¡Cómo tantas otras!
No es que le cayera mla ya que al fin y al cabo era solo un alumno más pero bueno, simplemente no le gustaba mucho su actitud.
Se quedo mirando al otro con cierto descaro, se veía fatigado, cansado, exhausto. El otro debía haber estado hace mucho tiempo caminando sin rumbo por todo el bosque y sobretodo yendo cayendose por todos lados, clavandose piedras, ramas, ¡lo raro sería que estuviera sin ningún rasguño! De algo había servido que el otro hubiera venido, quizás su damisela no era él, sino....alguna hermana suya linda que fuera todo lo que a él le faltaba. Sí, una rubia hermosa de ojos verdes, pero con las cejas depiladas. Ante semejantes ideas su sonrisa se ensanchó de pronto.
Extendió su mano ofreciéndole ayuda en que se levantará pero se quedo mirando el pie dle otro, seguramente le dolería la apoyarlo. Lo salvaría, debería llevarlo a la enfermería, solo habia un problema............
¡NO RECORDABA COMO LLEGAR AL INSTITUTO!
Así que el gran heroe..... también estaba perdido...
Ante semejante idea que recorrió su cabeza como un trueno se alarmó pudiendo notarse claramente en su rostor, pero intentó calmarse, pensar las cosas con cabeza frias, no tener que alarmarse tan pronto, seguramente como er aun uheroe con el mero hecho de seguir si instinto e intuiciones podrian irse ambos sin ningún problema....HAHAHAHA ¡Pues claro!
En fin, seguidamente se arrodilló para poder agarrar el cuerpo del otro, había que reconocer que era pequeño y débil, y lo peor es que aquello despertó el espiritu protector del gran heroe.
-Hahaha~¿ por qué viniste aquí? Hahaha ~mira lo que te hiciste, voy a ayudarte, el gran héroe lo hará hahahahaha~! Ok Arthiee?!~!!-dijó con chillidos.
Con su tipica voz que se clava en los oidos y se repite inumerables veces dentro de la cabeza siendo de las irritante en algunas ocasiones, sobretodo como se cogía bastante confianza como para llamarle ``Arthie´´ y no Arthur, que era su verdadero nombre, el americano sin duda era idiota, pero sabía uqe hacer para poder enrabiar al otro y de paso gastarle una broma, que seguramente para el británico fuera como mínimo de mal gusto.
Llevándolo en brazos lo dejo sobre el suelo sacando un pañuelo con la bandera americana por supuesto con una sonrisa tonta y estúpida cosida a sus labios como si no pudiera quittarse.
-quitate los pantalones voy a vendar aunque sea un poco de la pierna para que puedas andar y seguramente estes sangrando por semejante caida-dijó con aquella sonrisa inocente, no veía malicia en lo que acababa de pedirle, al fin y al cabo simplemente lo veía como un alumno, por lo que no era raro que un chico lo viera así....¿no?
De pronto hubo algo que llamo su atención, ahora que se fijaba verlo tan sumiso, débil, herido lo hacia verse...¿mejor? No, debe ser que como es un héroe el verlo así le hace sentirse ás heroico, no que tenga los ojos más hermosos que jamás hubiera visto...¿Verdad?
- Spoiler:
(SIENTO QUE ME SALGAN LARGOS ;////; me gusta demasiado el UsUk xD y quiero que el gran héroe todas sus ocurrencias incoherentes salgan a la luz)
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
-¡Rayos!- eso había sido demasiado ruidoso, ahora lo más seguro era que ese gordo yankee lo encontrara y se burlara del estado tan deplorable en el que se encontraba. ¡Bingo! Escuchaba los pesados pasos norteamericanos acercarse, escucho como lo matorrales a su lado se movían para darle paso al esbelto cuerpo americano. Pudo verlo, como su alegre expresión cambiaba a una de total decepción al verlo.
-Fuck! Lo que me faltaba- maldijo por lo bajo. ¿Por qué todos lo miraban con desprecio? ¿Era mucho pedir que alguien le dedicara una sincera sonrisa solo a él? ¿Tanto desilusionaba al americano el encontrarlo a él en vez de a una linda chica perdida? Aunque debía reconocer que el igual se desilusionaría en el caso del mayor.
Ya lo veía venir, sentí que en cualquier momento oiría su estridente y chillona risa burlándose de él, pero en vez de eso veía como sonreía y le ofrecía su mano.
Eso… realmente no se lo esperaba, aunque muy en el fondo, cosa que NUNCA reconocería, le alegraba profundamente.
Dudo en tomar su mano, pues lo más probable es que no pudiera pararse debido a la herida en su tobillo. Noto como la mano del americano se tensaba y su rostro antes lleno de confianza cambiaba drásticamente a uno de terror e inseguridad. “genial, ¿ahora que le pasaba a ese gringo?” y después decían que él era el extraño.
Dejo de divagar, más bien criticar al profesor cuando este se arrodillo quedando a su altura para luego tomarlo en brazos. ¿Pe que shit se creía ese yankee con problemas de ego? El no era una chica para que lo tomara de esa forma, intento protestar, pero los firmes brazos del maestro se lo impedían. OH NO…. Otra vez esa estúpida distorsión de su hermoso nombre acompañada de esa irritante voz.
-¡Mi nombre es Arhur no Arthie maldición!... profesor-debía recordar que hablaba con un profesor.- Recuerdo habérselo dicho ya varias veces antes- se sonroja y desvía la mirada al percatarse de la indebida cercanía que mantenían sus cuerpos en ese momento. - A-además lo que yo haga aquí y en que condiciones es asunto mío.
Fue depositado suavemente en un lugar más cómodo por el mayor y saco de su bolsillo un pañuelo con la bandera americana estampada en el. Extraño… no sabia porque no le sorprendía en lo absoluto.
Un momento… creía, rogaba, haber escuchado mal… ¿Q-qué era lo que ese yankee con delirios de grandeza le pedía? ¡¡¿Qué se quitara sus pantalones?!!
-¡¿Q-qué dices?! ¿Cómo se te ocurre pedirme tal cosa? ¡No estoy para bromas!- esperaba que en cualquier momento le dijese algo como “¡te la creíste!” o “no puedo creer que hayas caído”, pero no, esas palabras nunca llegaron, en su lugar solo veía esa expresión llena de inocencia. No… espera… ¡se lo estaba pidiendo enserio!, realmente le estaba pidiendo que se quitara los pantalones para vendarlo.
-Oh em… ah! Emm veras… - realmente se encontraba nervioso, cosa que empeoro cuando noto que el maestro comenzaba a mirarlo de una manera distinta. –Realmente no creo que sea necesario,, puedo aguantar hasta legar a la escuela, además no es necesario que siga perdiendo el tiempo con migo, puedo cuidarme solo.- No podía, no podía permitir que el maestro viera las innumerables marcas y moretones que había en sus piernas producto de sus encuentros con el rector. Con los ojos opacos por el recuerdo se levanto con dificultad, mas el punzante dolor en su tobillo hizo que perdiera el equilibrio cayendose.
-Fuck! Lo que me faltaba- maldijo por lo bajo. ¿Por qué todos lo miraban con desprecio? ¿Era mucho pedir que alguien le dedicara una sincera sonrisa solo a él? ¿Tanto desilusionaba al americano el encontrarlo a él en vez de a una linda chica perdida? Aunque debía reconocer que el igual se desilusionaría en el caso del mayor.
Ya lo veía venir, sentí que en cualquier momento oiría su estridente y chillona risa burlándose de él, pero en vez de eso veía como sonreía y le ofrecía su mano.
Eso… realmente no se lo esperaba, aunque muy en el fondo, cosa que NUNCA reconocería, le alegraba profundamente.
Dudo en tomar su mano, pues lo más probable es que no pudiera pararse debido a la herida en su tobillo. Noto como la mano del americano se tensaba y su rostro antes lleno de confianza cambiaba drásticamente a uno de terror e inseguridad. “genial, ¿ahora que le pasaba a ese gringo?” y después decían que él era el extraño.
Dejo de divagar, más bien criticar al profesor cuando este se arrodillo quedando a su altura para luego tomarlo en brazos. ¿Pe que shit se creía ese yankee con problemas de ego? El no era una chica para que lo tomara de esa forma, intento protestar, pero los firmes brazos del maestro se lo impedían. OH NO…. Otra vez esa estúpida distorsión de su hermoso nombre acompañada de esa irritante voz.
-¡Mi nombre es Arhur no Arthie maldición!... profesor-debía recordar que hablaba con un profesor.- Recuerdo habérselo dicho ya varias veces antes- se sonroja y desvía la mirada al percatarse de la indebida cercanía que mantenían sus cuerpos en ese momento. - A-además lo que yo haga aquí y en que condiciones es asunto mío.
Fue depositado suavemente en un lugar más cómodo por el mayor y saco de su bolsillo un pañuelo con la bandera americana estampada en el. Extraño… no sabia porque no le sorprendía en lo absoluto.
Un momento… creía, rogaba, haber escuchado mal… ¿Q-qué era lo que ese yankee con delirios de grandeza le pedía? ¡¡¿Qué se quitara sus pantalones?!!
-¡¿Q-qué dices?! ¿Cómo se te ocurre pedirme tal cosa? ¡No estoy para bromas!- esperaba que en cualquier momento le dijese algo como “¡te la creíste!” o “no puedo creer que hayas caído”, pero no, esas palabras nunca llegaron, en su lugar solo veía esa expresión llena de inocencia. No… espera… ¡se lo estaba pidiendo enserio!, realmente le estaba pidiendo que se quitara los pantalones para vendarlo.
-Oh em… ah! Emm veras… - realmente se encontraba nervioso, cosa que empeoro cuando noto que el maestro comenzaba a mirarlo de una manera distinta. –Realmente no creo que sea necesario,, puedo aguantar hasta legar a la escuela, además no es necesario que siga perdiendo el tiempo con migo, puedo cuidarme solo.- No podía, no podía permitir que el maestro viera las innumerables marcas y moretones que había en sus piernas producto de sus encuentros con el rector. Con los ojos opacos por el recuerdo se levanto con dificultad, mas el punzante dolor en su tobillo hizo que perdiera el equilibrio cayendose.
- Spoiler:
- adsad! no te preocupes, yo tambien amo el usuk!!, aunq realmente me apena ya que tu roleas muy bien y yo como soy novatita dejo bastate q desear u__u
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
El otro realmente le recordo a un gatito herido en medio de una calle llena de gente pasando sin que nadie lo socorriera. Y aquello era inconcebible, debía, DEBÍA, ayudarlo. Quizás el destino tuviera algo que ver, ya que realmente era casualidad estar en el momento y en el lugar oportuno, para algo era un profesor de lo más excelente. Quizás al ayudar a aquel joven en apuros ganaría un aumento de sueldo, o algo por el estilo, como profesor de ética, se supone que las cosas se hacen para obtener una satisfacción consigo mismo obrando desinteresadamente pero....¿no está mal ser un poco capitalista no? Sólo un poco no hace daño a nadie. Además era un héroe que debería adorar todo el mnundo, pero la cara que puso el alumno al verlo no fue especialmente esperanzado, sino más bien casi agonizante y desesperado, como si aquel fuera un lobo que iba a comerse a su presa.
¡Menuda tonteria! Ni que fuera a hacerle nada malo, simplemente como buen héroe quería ayudarlo, ¡Hahaha! Aún sin tener nadie que lo hubiera visto.
También había que decir que agradeció que el otro no se pusiera como una chica que iba a ser violada pegandole, insultandole y demás, ya que había ''conocido'' al otro, adquiriendo una imagen de él un poco...''antipatica'' No sabía valorar lo buen profesor que era. Siempre que decía alguna cosa COHERENTE, simplemente sabía replicarlo, o callarse poniendo una cara que lo decía todo. O cuando decía algo que a los demás les hacia gracia el simplemente torcía el gesto. ¡Era demasiado molesto! Y lo peor no era aquello, sino siempre que le gastaba una broma se ponía a la defensiva y le levantaba la voz. ¡Menudo crio!
No como él....
NO
-Para mi siempre serás Arthie~! es un nombre mucho más gracioso, como tú...-dijó de forma estúpida, como siempre con aquella sonrisa de lado a lado, llegando una oreja a la otra.
De pronto se mosqueó ante el segundo comentario,se supone que s un alumno del centro por lo tanto es evidente que si está herido o perdido debería decirselo al gran profesor, no tomarlo como si fuera su amigo de toda la vida. Porque obviamente no eran amigos. Aún recordaba la primera vez que lo vio, simplemente se burló de sus cejas....¡Es que son divertidas! Las comparó con gusanos con pelos grandes....Aún recuerdo como el otro parecia querer matarlo en aquel momento. Pero aún recordaba aquellos ojos verdes tan brillantes, tan hermosos, y aquella figura débil y esa piel que seguramente sería tan suave como si fuera una muñeca de porcelana.... Ante todo tipo de ideas un ligerisimo rubor apareció en su rostro. Oh my god. No, no puedo ver a un alumnod e aquella forma. Negó con la cabeza repetidas veces. No era pederasta, ni homosexual, ni cejosexual....¡NO era nada relacionado con él!
-No es asunto tuyo, es tuyo y del colegio...-senteció pareciendo que aquella idea había salido de una vez por todas de su cabeza.
Se quedo mirando al otro que cuando lo dejo en el suelo y espero a que lo hiciera, pero aquel momento nunca llegó para de prponto ver como el otro comenzaba a gritar. A aquel ritmo no haría falta buscar el camino para volver, ya que con tanto grito seguramente alguien les oiría y vendrían a por ellos, aunque si el otro seguía con sus chillidos pensarían que lo estaba maltratando o algo, cuando simplemente quería ayudarlo.
-Hablo muy en serio, hahaha-insistió.
No iba a asombrarse de lo que viera, era hombre por lo tanto no iba a pasar nada, si fuera una mujer...¡De ninguna forma se lo pediría! Ya que pensaría que era un pervertido, o algo peor, pero simplemente si era un hombre no debía avergonzarse de ello. Además sino arreglaba su herida debería llevarlo en brazos todo el camino, que por cierto ni sabía pro donde era, y aunque no pesará mucho la idea realmente no le hacia gracia.
´-Yo creo que.....
Antes de poder terminar tan siquiera la frase el otro cayó irremediablmente al suelo, por lo que sus ojos se abrieron como platos al verlo caer.
-Hey!-gritó acercándose a este para aún manteniendo aquella boba sonrisa agarrarlo aun cuando ya cayó al suelo, viendo que el otro realmnete no podría llegar por mucho que insistiera y seguramente si se lo volviera a pedir se negaría de neuvo.
-Sé que dices eso, pero no vas a poder aguantar todo el camino así que quitate los pantalones simplemente quiero vendarte las heridas de las piernas para que puedas aunque sea mejor apoyarlas a ver si puedo conseguir que vayas mejor...-explicó hablando bastante deprisa como solia hacerlo y con su voz tan aguda.
Sabía que tras aquello volvería a decir que no así que aprovecho que estaba en el suelo para desabrochar el primer botón de su pantalon y parar sonriéndole de forma dulce.
-Okey? Es por tu bien, I'm a man, no me voy a asustar además -le mostró la lengua de forma infantil guiñandole un ojo-no me van los chicos, haha~!-puntualizó
¡Menuda tonteria! Ni que fuera a hacerle nada malo, simplemente como buen héroe quería ayudarlo, ¡Hahaha! Aún sin tener nadie que lo hubiera visto.
También había que decir que agradeció que el otro no se pusiera como una chica que iba a ser violada pegandole, insultandole y demás, ya que había ''conocido'' al otro, adquiriendo una imagen de él un poco...''antipatica'' No sabía valorar lo buen profesor que era. Siempre que decía alguna cosa COHERENTE, simplemente sabía replicarlo, o callarse poniendo una cara que lo decía todo. O cuando decía algo que a los demás les hacia gracia el simplemente torcía el gesto. ¡Era demasiado molesto! Y lo peor no era aquello, sino siempre que le gastaba una broma se ponía a la defensiva y le levantaba la voz. ¡Menudo crio!
No como él....
NO
-Para mi siempre serás Arthie~! es un nombre mucho más gracioso, como tú...-dijó de forma estúpida, como siempre con aquella sonrisa de lado a lado, llegando una oreja a la otra.
De pronto se mosqueó ante el segundo comentario,se supone que s un alumno del centro por lo tanto es evidente que si está herido o perdido debería decirselo al gran profesor, no tomarlo como si fuera su amigo de toda la vida. Porque obviamente no eran amigos. Aún recordaba la primera vez que lo vio, simplemente se burló de sus cejas....¡Es que son divertidas! Las comparó con gusanos con pelos grandes....Aún recuerdo como el otro parecia querer matarlo en aquel momento. Pero aún recordaba aquellos ojos verdes tan brillantes, tan hermosos, y aquella figura débil y esa piel que seguramente sería tan suave como si fuera una muñeca de porcelana.... Ante todo tipo de ideas un ligerisimo rubor apareció en su rostro. Oh my god. No, no puedo ver a un alumnod e aquella forma. Negó con la cabeza repetidas veces. No era pederasta, ni homosexual, ni cejosexual....¡NO era nada relacionado con él!
-No es asunto tuyo, es tuyo y del colegio...-senteció pareciendo que aquella idea había salido de una vez por todas de su cabeza.
Se quedo mirando al otro que cuando lo dejo en el suelo y espero a que lo hiciera, pero aquel momento nunca llegó para de prponto ver como el otro comenzaba a gritar. A aquel ritmo no haría falta buscar el camino para volver, ya que con tanto grito seguramente alguien les oiría y vendrían a por ellos, aunque si el otro seguía con sus chillidos pensarían que lo estaba maltratando o algo, cuando simplemente quería ayudarlo.
-Hablo muy en serio, hahaha-insistió.
No iba a asombrarse de lo que viera, era hombre por lo tanto no iba a pasar nada, si fuera una mujer...¡De ninguna forma se lo pediría! Ya que pensaría que era un pervertido, o algo peor, pero simplemente si era un hombre no debía avergonzarse de ello. Además sino arreglaba su herida debería llevarlo en brazos todo el camino, que por cierto ni sabía pro donde era, y aunque no pesará mucho la idea realmente no le hacia gracia.
´-Yo creo que.....
Antes de poder terminar tan siquiera la frase el otro cayó irremediablmente al suelo, por lo que sus ojos se abrieron como platos al verlo caer.
-Hey!-gritó acercándose a este para aún manteniendo aquella boba sonrisa agarrarlo aun cuando ya cayó al suelo, viendo que el otro realmnete no podría llegar por mucho que insistiera y seguramente si se lo volviera a pedir se negaría de neuvo.
-Sé que dices eso, pero no vas a poder aguantar todo el camino así que quitate los pantalones simplemente quiero vendarte las heridas de las piernas para que puedas aunque sea mejor apoyarlas a ver si puedo conseguir que vayas mejor...-explicó hablando bastante deprisa como solia hacerlo y con su voz tan aguda.
Sabía que tras aquello volvería a decir que no así que aprovecho que estaba en el suelo para desabrochar el primer botón de su pantalon y parar sonriéndole de forma dulce.
-Okey? Es por tu bien, I'm a man, no me voy a asustar además -le mostró la lengua de forma infantil guiñandole un ojo-no me van los chicos, haha~!-puntualizó
- Spoiler:
- Tonterías, adoro como roleas al tsunderoso cejudo xD no como yo que me sale un tanto OOC...pero lo hago sin querer xD intento pensar de la forma más estúpida posible para pensar como lo haría él xDDDD porque realmente me hace mucha gracia imaginar a Alfred intentando desnudar a Arthur(?) xDDDDDDDD y con una sonrisa estúpida xD
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Se encontraba en blanco, su cuerpo no le respondía, no supo en que momento paso de estar en pie a estar en el piso nuevamente. El profesor le hablaba, pero no podía escucharlo, veía como movía su boca talvez regañándolo. Se exalto de sobremanera saliendo de su ensoñación cuando el profesor desabrochaba su pantalón.
-¡¿Pero que mierda esta haciendo?! Fucking Git!! ¡Suelteme!- ¿Qué hacia? ¿Cómo se le ocurría desvestirlo? Más aun como se le ocurría hacerlo en un lugar como ese, donde en cualquier momento podría pasar alguien y verlos… Oh Fuck! Eso arruinaría totalmente su reputación.
“¡¿Qué no le van los chicos?!” ¿Qué se cree? ¡Como si eso le importara! Lo odiaba… odiaba su manera tan infantil de ser, ¿Cómo podía guiñarle un ojo en esa situación?, lo descolocaba, no era que ese gesto hubiese causado que su corazón casi saliera disparado por su boca. NO, solo era que el americano lo fastidiaba en su totalidad.
-Pro-profesor… por favor, deténgase.- forcejeaba con el americano en un vago intento por detenerlo.- Fucking Git! ¡No quiero que veas!- las lagrimas comenzaban a asomarse por sus ojos. No… no…no, no quería que lo viera, no quería que viera las sucias marcas que habían en su cuerpo, además eso le podría causar problemas a su rector.
Luchaba en vano, el maestro era demasiado fuerte, ni siquiera era capas de alejarlo aunque sea un poco de él. –Fucking git, stop!!- pero era tarde sus pantalones se encontraban abajo…
Sentía sus lagrimas brotar de sus ojos… temblaba… tenia miedo. –N-no mires, por favor- se acurruco ocultando su rostro tras sus rodillas.-
-No lo hagas.
Miraba hacia abajo avergonzado… avergonzado de él mismo, no quería ver esos limpios ojos azules como el cielo recriminándolo, no quería ver la expresión de asco que de seguro tendría el maestro en eso momentos.
Solo quería desaparecer.
-¡¿Pero que mierda esta haciendo?! Fucking Git!! ¡Suelteme!- ¿Qué hacia? ¿Cómo se le ocurría desvestirlo? Más aun como se le ocurría hacerlo en un lugar como ese, donde en cualquier momento podría pasar alguien y verlos… Oh Fuck! Eso arruinaría totalmente su reputación.
“¡¿Qué no le van los chicos?!” ¿Qué se cree? ¡Como si eso le importara! Lo odiaba… odiaba su manera tan infantil de ser, ¿Cómo podía guiñarle un ojo en esa situación?, lo descolocaba, no era que ese gesto hubiese causado que su corazón casi saliera disparado por su boca. NO, solo era que el americano lo fastidiaba en su totalidad.
-Pro-profesor… por favor, deténgase.- forcejeaba con el americano en un vago intento por detenerlo.- Fucking Git! ¡No quiero que veas!- las lagrimas comenzaban a asomarse por sus ojos. No… no…no, no quería que lo viera, no quería que viera las sucias marcas que habían en su cuerpo, además eso le podría causar problemas a su rector.
Luchaba en vano, el maestro era demasiado fuerte, ni siquiera era capas de alejarlo aunque sea un poco de él. –Fucking git, stop!!- pero era tarde sus pantalones se encontraban abajo…
Sentía sus lagrimas brotar de sus ojos… temblaba… tenia miedo. –N-no mires, por favor- se acurruco ocultando su rostro tras sus rodillas.-
-No lo hagas.
Miraba hacia abajo avergonzado… avergonzado de él mismo, no quería ver esos limpios ojos azules como el cielo recriminándolo, no quería ver la expresión de asco que de seguro tendría el maestro en eso momentos.
Solo quería desaparecer.
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Sin duda el otro era de lo más rarito. No le extrañaría nada que la gente no fuera mucho con él, era antipatico, molesto y sobretodo sus reacciones eran de lo más rara. Debería llevarlo al psicologo del colegio...¿espera ese no seria el mismo que el profesor de ética? Nah.... Sin duda ni siendo alguien con estudios podría entender a semejante inglés. ¿Acaso era homosexual? ¿Habría sufrido alguna violación de pequeño? Era la única explicación para que le tuviera tanto pánico pro quitarse unos pantalones con otro hombre que ni siquiera se había interesado en él. Ya que un héroe como él no se fijaría nunca en nadie como un alumno.
Además en cierto modo le recordaba en él por la forma de edesconectar, cuando algo no le interesaa simplemente pensaba en otro cosa y lo dejaba pasar. Y hasta que sus manos no agarraron los botones del otro no reaccionó. Viendo como comenzaba a gritar como si su vida dependiera de ello abriendo los ojos como platos. Wow....¿qué demonios le pasaba? Ya que incluso lo insultó. Si que debía estar molesto, pero no podía dejar qe el otro estuviera herido. Ya que era la responsabilidad suya coomo profesor y como gran héroe que debía ayudar al gran héroe. Y sobretodo insultarlo en inglés, aquello que lo veía como algo más cercano, realmente algún día le gustaría tener una conversación con él en inglés, ya que desde que estaba en aquel lugar nunca podía a halar con nadie en inglés.
Sin duda era tan raro, pero aunque obviamente no fuera el chico más guapo de todos, sabía de chicas que ya se habían fijado en él.¡ Estos jovenes! Ah! Hablaba como si fuera un viejo. NO WAY, el aún era joven, por lo tanto no debería hablar de aquella forma. Aunque ahora que lo pensaba todas las chicas que se habian fijado en él era unas..... NO ERA PORQUE ESTUVIERA CELOSO. Ni mucho menos. Es solo que sin duda eran de mentalidad...''demasiado abierto''Al igual que sus piernas, siempre abiertas Ok no. Simplemente es que ahora los jovenes empezaban a hacerlo demasiado temprano, luego llegaban los embarazados y ¡ZAS! en toda la boca.
Se quedo de piedra al escucharlo, La forma en que ahora se lo pedía era como mínimo de película porno. Y no era porque él las viera. Con lágrimas en los ojos ya sentía que se desmoronaba. ¿Qué podía ser? ¿QUÉ PODÍA ASUSTARLE TANTO? Su corazón dio un vuelco ante todo ese torbellino de sensaciones.
Oyó aquel último grito, consiguiendo por fin destapar la verdad, saber que era lo que le inquietaba tanto.
Su cuerpo se congeló, veía al otro acurrucarse en busca de autoconsuelo, temblaba, como si lo fuera a pegar o algo parecido, Su cuerpo, lleno de marcas, moratones, arañazos, mordeduras. Tonos rojizos, anaranjados, incluso morados. Su mirada se mostro entre el asombro y el mismisimo pánico. Aquella suave tez de porcelana, suave, clara, brillante, se encontraba maltratada por aquel conjunto de colores. Escuchó lo que el otro pidió mientras lloraba mirandolo con dolor. Aquello no se lo había hecho en el bosque, sin duda, eso se lo había hecho alguien. ¿Qué clase de ser depravado podría haber maltratado de aquella forma aun joven alumno? ¿Su padre? ¿Algún amigo? ¿Familiar? ¿Desconocido? Mil ideas asomaron en su cabeza. Para simplemente acercarse a él viendo como seguía temblando sintiendo como su alma se rompía en mil pedazos. Alguien lo había pasado tan mal cercano a él y el gran heroe ni siqueira era consciente. Quizás si que fuera su damisela en apuros, nadie más que aquel cejudo neceistaba su ayuda. Nadie más que él.
Se arrodilló bien para de pronto acogerlo en sus brazos, dandole el abrazo más fuerte que jamas habría dado, pero sin querer hacerle daño.
-Hey....¿quién te hizó todo esto? No diré nada, pero necesito que me lo digas...-tras aquello sonrió de forma forzada teniendolo aún entre sus brazos acaricaidno su nuca.
-No dejaré que te vuelva a hacer nada pero necesito tu ayuda, te ayudaré, I promise you, así que please, don't cry....
Además en cierto modo le recordaba en él por la forma de edesconectar, cuando algo no le interesaa simplemente pensaba en otro cosa y lo dejaba pasar. Y hasta que sus manos no agarraron los botones del otro no reaccionó. Viendo como comenzaba a gritar como si su vida dependiera de ello abriendo los ojos como platos. Wow....¿qué demonios le pasaba? Ya que incluso lo insultó. Si que debía estar molesto, pero no podía dejar qe el otro estuviera herido. Ya que era la responsabilidad suya coomo profesor y como gran héroe que debía ayudar al gran héroe. Y sobretodo insultarlo en inglés, aquello que lo veía como algo más cercano, realmente algún día le gustaría tener una conversación con él en inglés, ya que desde que estaba en aquel lugar nunca podía a halar con nadie en inglés.
Sin duda era tan raro, pero aunque obviamente no fuera el chico más guapo de todos, sabía de chicas que ya se habían fijado en él.¡ Estos jovenes! Ah! Hablaba como si fuera un viejo. NO WAY, el aún era joven, por lo tanto no debería hablar de aquella forma. Aunque ahora que lo pensaba todas las chicas que se habian fijado en él era unas..... NO ERA PORQUE ESTUVIERA CELOSO. Ni mucho menos. Es solo que sin duda eran de mentalidad...''demasiado abierto''
Se quedo de piedra al escucharlo, La forma en que ahora se lo pedía era como mínimo de película porno. Y no era porque él las viera. Con lágrimas en los ojos ya sentía que se desmoronaba. ¿Qué podía ser? ¿QUÉ PODÍA ASUSTARLE TANTO? Su corazón dio un vuelco ante todo ese torbellino de sensaciones.
Oyó aquel último grito, consiguiendo por fin destapar la verdad, saber que era lo que le inquietaba tanto.
Su cuerpo se congeló, veía al otro acurrucarse en busca de autoconsuelo, temblaba, como si lo fuera a pegar o algo parecido, Su cuerpo, lleno de marcas, moratones, arañazos, mordeduras. Tonos rojizos, anaranjados, incluso morados. Su mirada se mostro entre el asombro y el mismisimo pánico. Aquella suave tez de porcelana, suave, clara, brillante, se encontraba maltratada por aquel conjunto de colores. Escuchó lo que el otro pidió mientras lloraba mirandolo con dolor. Aquello no se lo había hecho en el bosque, sin duda, eso se lo había hecho alguien. ¿Qué clase de ser depravado podría haber maltratado de aquella forma aun joven alumno? ¿Su padre? ¿Algún amigo? ¿Familiar? ¿Desconocido? Mil ideas asomaron en su cabeza. Para simplemente acercarse a él viendo como seguía temblando sintiendo como su alma se rompía en mil pedazos. Alguien lo había pasado tan mal cercano a él y el gran heroe ni siqueira era consciente. Quizás si que fuera su damisela en apuros, nadie más que aquel cejudo neceistaba su ayuda. Nadie más que él.
Se arrodilló bien para de pronto acogerlo en sus brazos, dandole el abrazo más fuerte que jamas habría dado, pero sin querer hacerle daño.
-Hey....¿quién te hizó todo esto? No diré nada, pero necesito que me lo digas...-tras aquello sonrió de forma forzada teniendolo aún entre sus brazos acaricaidno su nuca.
-No dejaré que te vuelva a hacer nada pero necesito tu ayuda, te ayudaré, I promise you, así que please, don't cry....
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Se sentía avergonzado, humillado, sucio, desolado. Se abrazaba a sus piernas en busca de refugio, huyendo de la mirada del oji-azul. No quería que lo viera, no quería que viera su cuerpo ni las lagrimas que no paraban de salir de sus ojos
Fuck! Se sentía tan jodidamente débil.
Se exalto al sentirse cobijado en un firme pero calido abrazo. Sentía el aliento del americano en su cuello dedicándole palabras de consuelo ¿Proteger? Le prometía proteger, pero… ¿De qué?
¿Por qué? Si el no quería ser protegido.
Sin importar cuanto le lastimara, que lo utilizara, que lo humillara Nikita era lo único que tenia. Era la única persona que lo hacia sentir amado, de una manera bastan retorcida, pero lo hacia. Con el sabia que al menos existía para alguien.
-No puedo decirlo… además… - no era más que un susurro forzado a salir de su garganta.- Yo no puedo ser salvado, no conozco otra manera aparte de esta, siempre a sido así… Shit! Yo… yo ya no…- lloraba en el pecho del americano agarrándose de manera desesperada a su ropa en busca de refugio.
“Ayúdame, por favor”
-Quiero regresar a mi habitación
Fuck! Se sentía tan jodidamente débil.
Se exalto al sentirse cobijado en un firme pero calido abrazo. Sentía el aliento del americano en su cuello dedicándole palabras de consuelo ¿Proteger? Le prometía proteger, pero… ¿De qué?
¿Por qué? Si el no quería ser protegido.
Sin importar cuanto le lastimara, que lo utilizara, que lo humillara Nikita era lo único que tenia. Era la única persona que lo hacia sentir amado, de una manera bastan retorcida, pero lo hacia. Con el sabia que al menos existía para alguien.
-No puedo decirlo… además… - no era más que un susurro forzado a salir de su garganta.- Yo no puedo ser salvado, no conozco otra manera aparte de esta, siempre a sido así… Shit! Yo… yo ya no…- lloraba en el pecho del americano agarrándose de manera desesperada a su ropa en busca de refugio.
“Ayúdame, por favor”
-Quiero regresar a mi habitación
- Spoiler:
- ;A;!! siento que sea tan corto pero es que!! adasd! lo sien lo siento
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
No comprendía como alguien podrìa ser tan despreciable de maltratar una piel tan brillante y atractiva. Casi como que de un ángel se tratará. Suave, delicada, y ahora simplemente un tono de colores que hacian más que aterrorizar u horrorizar a quien lo veía.
Todo aquello despertaba en él su instinto heróico. Nunca dejaría que nadie le hiciera nada semejante. Lo cuidaría, para que nadie jamás le volviera hacer aquello. Sólo debía esperar que el otro le dijera quien había sido, se vengaría. Le daría su merecido al sucio villano que pudiera hacerle aquello a su.... damisela en apuros.
No es que le gsutará un alumno...Hahaha, NO. Eso sería imposible. Su corazón debía pertenecer a alguien más mayor y una mujer. Pero solo queria protegerlo, no por ello se había enamorado ni nada parecido. Hahaha! Un héroe no cree en el amor a primera vista. Ni nada parecido a ello...¿VerdaD? Sentirlo entre sus brazos sincermente era reconfortante. Y de pronto algo asomó su cabeza. Conocía al inglés....¿de antes? Lo veía llorar de aquella forma y era como si ya lo hubiera visto llorar. Aún sabiendo que no era así que simplemente era un alumno que no tenía mucha relacion con él. Pero que tenian ambos la suficiente confianza como para estar asi junto a él. Cerró los ojos recapacitando....¿Le conocía? ¿LE CONOCÍA? ¿DE QUÉ? Um.... Sabía de algo pero nunca de qué. ¿Se habían visto antes? Vagando por su mente, sus recuerdos. Apareció algo dentro de él, como si intentará comprenderlo. ¿Él...de pequeño? '' Seguro que vendrá, él dijo que volvería'' Sólo pudo ver que decía el mismo de pequeño.... ¿Quién volvería? ¿De dónde? ¿Y porque en el fondo tenía la sensación de quién fuese no vovería nunca?
Aquel extraño trance o sueño que tuvo unos segundos hizo que su corazon se encogiera, casi que le mismo americano se pusiera a llorar. ¡Y lo peor es que no sabía porque!
Que raro era todo...
Y cuando pudo despertar de todo aquello por fin pudo escuchar la respuesta del inglés...¿No podía decirselo? ¿Acaso lo tendría amenazado con que no debía decirselo a nadie´? ¡Que tipo más astuto y calculador! Pero si el inglés no se lo decía no podría ayudarlo, ya que aquello era de pura lógica. Debía hacer que el otro se lo dijera. Cómo fuera. Además de que era un cabezota y un terco, así que no apraría hasta saberlo.
Escuchó atentamente lo demás que dijo sin comprender nada, y mucho menos como su voz se quebraba a partir del llanto. Lo miró con amplia preocupación snteindo como el otro se agarraba con fuerza a este.
Suspiró ligeramente. Para separarse levemente y agarrar sus mejilals con ambas manos dandole un suave beso en la frente con una sonrisa amplia y tranquilizadora.
-Don't cry, I promise you I'll help you.....forever....-sonrió para volver a tenerlo entre su sbrazos. Aquel aroma, era simplemente embrigante, su pelo, su cuello, desprendian un aroma simplemente delicioso, no sabía como pdoía pensar aquello tras eso.
-Pero para eso tienes que decirme quien te lo hizo, please, te ayudaré, haha, soy un héroe....así que no tienes nada de lo que preocuaprte, please, dime...´-insistio quedandose mirando en aquellos ojos que eran los unicos que podian hacerlo caer en un dulce shock del cual nunca quería despertar.
-te llevaré a tu habitación, pero antes debemos pasar por la enfermería a que cure todas tus heridas o tardaran mucho en sanar o quizás se infecten....-Susurró acaricaindo su mejilla sin poder apartar su rostro del otro notando la cercania que existia entre ambos limpiando sus lágrimas con la yema de los dedos.
Todo aquello despertaba en él su instinto heróico. Nunca dejaría que nadie le hiciera nada semejante. Lo cuidaría, para que nadie jamás le volviera hacer aquello. Sólo debía esperar que el otro le dijera quien había sido, se vengaría. Le daría su merecido al sucio villano que pudiera hacerle aquello a su.... damisela en apuros.
No es que le gsutará un alumno...Hahaha, NO. Eso sería imposible. Su corazón debía pertenecer a alguien más mayor y una mujer. Pero solo queria protegerlo, no por ello se había enamorado ni nada parecido. Hahaha! Un héroe no cree en el amor a primera vista. Ni nada parecido a ello...¿VerdaD? Sentirlo entre sus brazos sincermente era reconfortante. Y de pronto algo asomó su cabeza. Conocía al inglés....¿de antes? Lo veía llorar de aquella forma y era como si ya lo hubiera visto llorar. Aún sabiendo que no era así que simplemente era un alumno que no tenía mucha relacion con él. Pero que tenian ambos la suficiente confianza como para estar asi junto a él. Cerró los ojos recapacitando....¿Le conocía? ¿LE CONOCÍA? ¿DE QUÉ? Um.... Sabía de algo pero nunca de qué. ¿Se habían visto antes? Vagando por su mente, sus recuerdos. Apareció algo dentro de él, como si intentará comprenderlo. ¿Él...de pequeño? '' Seguro que vendrá, él dijo que volvería'' Sólo pudo ver que decía el mismo de pequeño.... ¿Quién volvería? ¿De dónde? ¿Y porque en el fondo tenía la sensación de quién fuese no vovería nunca?
Aquel extraño trance o sueño que tuvo unos segundos hizo que su corazon se encogiera, casi que le mismo americano se pusiera a llorar. ¡Y lo peor es que no sabía porque!
Que raro era todo...
Y cuando pudo despertar de todo aquello por fin pudo escuchar la respuesta del inglés...¿No podía decirselo? ¿Acaso lo tendría amenazado con que no debía decirselo a nadie´? ¡Que tipo más astuto y calculador! Pero si el inglés no se lo decía no podría ayudarlo, ya que aquello era de pura lógica. Debía hacer que el otro se lo dijera. Cómo fuera. Además de que era un cabezota y un terco, así que no apraría hasta saberlo.
Escuchó atentamente lo demás que dijo sin comprender nada, y mucho menos como su voz se quebraba a partir del llanto. Lo miró con amplia preocupación snteindo como el otro se agarraba con fuerza a este.
Suspiró ligeramente. Para separarse levemente y agarrar sus mejilals con ambas manos dandole un suave beso en la frente con una sonrisa amplia y tranquilizadora.
-Don't cry, I promise you I'll help you.....forever....-sonrió para volver a tenerlo entre su sbrazos. Aquel aroma, era simplemente embrigante, su pelo, su cuello, desprendian un aroma simplemente delicioso, no sabía como pdoía pensar aquello tras eso.
-Pero para eso tienes que decirme quien te lo hizo, please, te ayudaré, haha, soy un héroe....así que no tienes nada de lo que preocuaprte, please, dime...´-insistio quedandose mirando en aquellos ojos que eran los unicos que podian hacerlo caer en un dulce shock del cual nunca quería despertar.
-te llevaré a tu habitación, pero antes debemos pasar por la enfermería a que cure todas tus heridas o tardaran mucho en sanar o quizás se infecten....-Susurró acaricaindo su mejilla sin poder apartar su rostro del otro notando la cercania que existia entre ambos limpiando sus lágrimas con la yema de los dedos.
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
No podía, como podría traicionarlo, a él, a la única persona que le demostró amor. No podría, pero la insistente mirada del americano le hacia dudar. ¿Estaría bien si lo hacia? ¿Estaría bien si traicionaba a la persona que amaba?
Amaba… ¿realmente lo amaba?
El maestro le seguía abrazando, dándole palabras de consuelo. Se sentía tan cómodo en sus brazos, se sentía protegido y querido. Una deliciosa ilusión que quería mantener por más tiempo.
¿Proteger?
¿Ese idiota que se creía? ¿Creía que era una clase de súper héroe que podía salvar a todos? ¿Creía que lo que le pasaba a él era injusto? ¿Qué era injusto? ¿El hecho de que se revolcara con el rector? ¿El hecho de que se encontrara con él? ¿Qué se lastimara? ¿Qué lo lastimara?
¿Qué era lo realmente injusto?
Sintió unas grandes y fuertes manos tomar su rostro, no quería, no quería encontrare con esos ojos puros como el cielo, desistió lo más que pudo de encontrarse con esa mirada, pero le fue imposible. Solo le bastó un segundo para perderse en esa mirada azul como el cielo, le bastó un segundo para estremecerse por la suaves caricias que le brindaba, le bastó un segundo para sentirse a salvo.
Salio de su trance sonrojándose abruptamente, aun se encontraba con los pantalones abajo y la posición en la que estaban era demasiado comprometedora.
-Será mejor que volvamos –se paro con ayuda del otro y arreglo sus pantalones.- En la enfermería verán mi tobillo… Y respecto a lo otro... lo siento.
Amaba… ¿realmente lo amaba?
El maestro le seguía abrazando, dándole palabras de consuelo. Se sentía tan cómodo en sus brazos, se sentía protegido y querido. Una deliciosa ilusión que quería mantener por más tiempo.
¿Proteger?
¿Ese idiota que se creía? ¿Creía que era una clase de súper héroe que podía salvar a todos? ¿Creía que lo que le pasaba a él era injusto? ¿Qué era injusto? ¿El hecho de que se revolcara con el rector? ¿El hecho de que se encontrara con él? ¿Qué se lastimara? ¿Qué lo lastimara?
¿Qué era lo realmente injusto?
Sintió unas grandes y fuertes manos tomar su rostro, no quería, no quería encontrare con esos ojos puros como el cielo, desistió lo más que pudo de encontrarse con esa mirada, pero le fue imposible. Solo le bastó un segundo para perderse en esa mirada azul como el cielo, le bastó un segundo para estremecerse por la suaves caricias que le brindaba, le bastó un segundo para sentirse a salvo.
Salio de su trance sonrojándose abruptamente, aun se encontraba con los pantalones abajo y la posición en la que estaban era demasiado comprometedora.
-Será mejor que volvamos –se paro con ayuda del otro y arreglo sus pantalones.- En la enfermería verán mi tobillo… Y respecto a lo otro... lo siento.
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Aquel chico...no, no podía dejar las cosas como estaban. Un escalofrio recorrió su cuerpo, el otro no se sentía orgullos de ello. Seguro que alguien lo tiene amenazado y por eso no decía nada. No podía dejar las cosas así. Se volvió a repetir. Aquel chico con los ojos con los ojos más hermosos de todos no podía tolerar que sufiera de aquella forma. Su corazón se rompía aún de verlo. Se sentía inútil, no saber medicina para poder cuidarlo y sobretodo estar en medio de la nada para tener las cosas necesarias, sin duda así no podría andar. ¿Aquello era una casualidad o el destino? ¿El destino desearía que saliera de aquella jaula que alguien le tenía encerrado? Aquel ser depravado que acababa de cortarle las alas al más hermoso angel no merecía seguir viviendo...Lo mataría con sus propias manos. Aquel sucio ser que le había puesto un techo de cristal del que solo el que se choca se daba cuenta mientras los demás no se daban ni cuenta y no le dejaan subir más alto....¡El se merecía unav ida normal, seguir subiendo que nadie le molestará! PERO NO! Alguien se había entrometido. Nunca se lo perdonaría. NO sabía quien era pero lograría que lo expulsaran si era algun alumno, lo juraba.
Espero un nombre, un simple nombre para agolparse a él, para cuando lo viera recordarle todos sus antepasados porque en cuanto lo pillará él estaría con ellos. Le sacaría la cabeza del cuerpo y jugaría con ella al futbol.
Pero aquel nombre que tanto ansiaba nunca llego, ¿por qué? Por que!? Debía decirselo, debía hacerlo, no podía tomar represalias sino sabia quien era el culpable. No podía obligarle a decirlo pero no podía dejar que el otro siguiera sufriendo. ¿Tan amenaazdo lo tenía? A saber que le habría dicho que haría si alguien se enteraba de ello. Se quedo mirando su rostro para encontrarse ambas miradas, su sonrisa no se encontraba presente, era un rostro serio, duro, no dejaba que nadie tocaran lo suyo..¿Cuando se volvio suyo? Era su territorio, su propiedad. Se acabab de convertir aquel chaval en su objeto, nadie aparte de él podía tocarlo. No era como si el inglés fuer asu juguete ya que nunca le haría nada que no debiera ni nunca le haria nada que le otro no quisiera, pero si que era como su territorio. Era aquel jarron precioso, divino, y caro que solamente ves porque te da miedo tocarlo, ya que sabes que puede romperse.... y alguien se hubiera atrevido a cogerlo y tirarlo contra la pared y solo quedaran los trozos. El recompondría todas las piezas del jarron pero para ello debía evitar que aquel gracioso volveria a hacerlo y no saliera como si nada de su acción.
El otro simplemente esquvio todo aquello como si el tema no tuviera que ver con él, NO . Insistiría el americano era mucho mas cabezota y terco de lo que el otro pudiera tna siquiera llegar a imaginarse. Así que se coloco encima suya, realmente si alguien los veía se tomaría la interpretación equivocada de lo que estaba sucediendo. Lo miro serio mientras sabiendo que no necesitab ani siquiera cogerlo para que no se fuera, no podría andar más de dos pasos y mucho menos con el americano quitarselo de encima
-Dimelo...me da igual, no nos vamos a ir hasta que me digas, que hijo de *uta te ha hecho eso...-sabía que su lenguaje no era el de un profesor, pero realmente estaba enfadado, muy enojado, no daba miedo pero realmente imponía respeto.
Su rostro se acerco al ajeno intentando esbozar una sonrisa mientras acariciba el rostro ajeno, viendo que al menos el idiota que le habia hecho aquello habia tenido la ''decencia'' de no dañar tanto la cara como otras partes del cuerpo.
-Please, sólo quiero ayudarte, te ayudaré a que note lo vuelva a hacer, no djearé que nadie te haga eso...-a lo mejor era más que una persona un grupo de chicos que abusaban de él ante semejante idea solo pudo abrazarlo aun encima suya con los pantalones del otro aun bajados para impulsiva e inconscientemente besar su mejilla de forma protecotra, no habia malicia en aquello pero no pudo evitar que un suave sonrojo surcará sus mejillas.
-Solo quiero ayudarte, I swear you....
Espero un nombre, un simple nombre para agolparse a él, para cuando lo viera recordarle todos sus antepasados porque en cuanto lo pillará él estaría con ellos. Le sacaría la cabeza del cuerpo y jugaría con ella al futbol.
Pero aquel nombre que tanto ansiaba nunca llego, ¿por qué? Por que!? Debía decirselo, debía hacerlo, no podía tomar represalias sino sabia quien era el culpable. No podía obligarle a decirlo pero no podía dejar que el otro siguiera sufriendo. ¿Tan amenaazdo lo tenía? A saber que le habría dicho que haría si alguien se enteraba de ello. Se quedo mirando su rostro para encontrarse ambas miradas, su sonrisa no se encontraba presente, era un rostro serio, duro, no dejaba que nadie tocaran lo suyo..¿Cuando se volvio suyo? Era su territorio, su propiedad. Se acabab de convertir aquel chaval en su objeto, nadie aparte de él podía tocarlo. No era como si el inglés fuer asu juguete ya que nunca le haría nada que no debiera ni nunca le haria nada que le otro no quisiera, pero si que era como su territorio. Era aquel jarron precioso, divino, y caro que solamente ves porque te da miedo tocarlo, ya que sabes que puede romperse.... y alguien se hubiera atrevido a cogerlo y tirarlo contra la pared y solo quedaran los trozos. El recompondría todas las piezas del jarron pero para ello debía evitar que aquel gracioso volveria a hacerlo y no saliera como si nada de su acción.
El otro simplemente esquvio todo aquello como si el tema no tuviera que ver con él, NO . Insistiría el americano era mucho mas cabezota y terco de lo que el otro pudiera tna siquiera llegar a imaginarse. Así que se coloco encima suya, realmente si alguien los veía se tomaría la interpretación equivocada de lo que estaba sucediendo. Lo miro serio mientras sabiendo que no necesitab ani siquiera cogerlo para que no se fuera, no podría andar más de dos pasos y mucho menos con el americano quitarselo de encima
-Dimelo...me da igual, no nos vamos a ir hasta que me digas, que hijo de *uta te ha hecho eso...-sabía que su lenguaje no era el de un profesor, pero realmente estaba enfadado, muy enojado, no daba miedo pero realmente imponía respeto.
Su rostro se acerco al ajeno intentando esbozar una sonrisa mientras acariciba el rostro ajeno, viendo que al menos el idiota que le habia hecho aquello habia tenido la ''decencia'' de no dañar tanto la cara como otras partes del cuerpo.
-Please, sólo quiero ayudarte, te ayudaré a que note lo vuelva a hacer, no djearé que nadie te haga eso...-a lo mejor era más que una persona un grupo de chicos que abusaban de él ante semejante idea solo pudo abrazarlo aun encima suya con los pantalones del otro aun bajados para impulsiva e inconscientemente besar su mejilla de forma protecotra, no habia malicia en aquello pero no pudo evitar que un suave sonrojo surcará sus mejillas.
-Solo quiero ayudarte, I swear you....
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Comenzaba a hacer frío, el cielo empezaba a tomar tonos anaranjados desvaneciéndose hacia el negro. El azul iba desapareciendo… desvaneciéndose… Poco le importaba porque tenía su propio cielo mirándolo… su propio sol dándole calor. Sus ojos, su sonrisa le hacían creer que todo iba a estar bien, que ya nadie le haría sufrir, que nadie lo lastimaría.
Un sueño…
Un dulce sueño, un calido sueño. Un torbellino de sentimientos se agolpaba en su pecho, dolor, alegría, soledad y un tremendo vacío.
Pronto vio esos azules ojos más cerca de lo que ya estaban, sintió un peso extra sobre él y se vio acorralado contra el piso por el americano. No había escapatoria, ni siquiera a su mirada, se sentía atrapado por ella.
El otro le seguía insistiendo con un nombre, pero no podía… no podía… Si lo hacia lo más seguro es que fuera a lastimarlo y él no quería eso, no quería hacerle daño al otro. Además lo más probable es que el americano saldría perjudicado por lo que mejor era callar.
-Yo... lo siento, pe-pero –serró los ojos con fuerza al ver la mano ajena acercándose a su rostro, un acto reflejo… dedujo, pero lo único que percibió fue la calida mano acariciando su rostro con delicadeza. Abrió sus ojos lentamente para ver como el otro le dedicaba una calida sonrisa, una calida y hermosa sonrisa.
Una felicidad inundo su corazón al saberse único destinatario de esta.
Tal vez… el si pueda sacarlo de esa oscuridad… solo tal vez intentaría confiar en él.
-Si lo digo… prométeme que no harás nada contra él… por favor… aun es especial para mi… -el otro lo abrasaba de manera protectora, ¡al diablo con todo! ¿Que importaba que estuvieran en el piso, el con los pantalones abajo en una comprometedora posición? Ahí se encontraba él, siendo consolado, protegido.
No pudo más que devolverle el abrazo, con algo de timidez y susurrar con temor un nombre al oído del otro.
Estrecho el abrazo, no quería que se fuera, quería que se quedara junto a él, ahí, solos los dos sin nadie de que preocuparse. Lo abrazo con más fuerza temiendo la reacción del otro, temiendo el que se fuera a encara al otro. No quería que ninguno de los dos saliese lastimado, solo quería que ese asunto se enterrara en lo más profundo junto a él, donde nadie saliese lastimado.
-Ni… Nikita… Arlovski…
Un sueño…
Un dulce sueño, un calido sueño. Un torbellino de sentimientos se agolpaba en su pecho, dolor, alegría, soledad y un tremendo vacío.
Pronto vio esos azules ojos más cerca de lo que ya estaban, sintió un peso extra sobre él y se vio acorralado contra el piso por el americano. No había escapatoria, ni siquiera a su mirada, se sentía atrapado por ella.
El otro le seguía insistiendo con un nombre, pero no podía… no podía… Si lo hacia lo más seguro es que fuera a lastimarlo y él no quería eso, no quería hacerle daño al otro. Además lo más probable es que el americano saldría perjudicado por lo que mejor era callar.
-Yo... lo siento, pe-pero –serró los ojos con fuerza al ver la mano ajena acercándose a su rostro, un acto reflejo… dedujo, pero lo único que percibió fue la calida mano acariciando su rostro con delicadeza. Abrió sus ojos lentamente para ver como el otro le dedicaba una calida sonrisa, una calida y hermosa sonrisa.
Una felicidad inundo su corazón al saberse único destinatario de esta.
Tal vez… el si pueda sacarlo de esa oscuridad… solo tal vez intentaría confiar en él.
-Si lo digo… prométeme que no harás nada contra él… por favor… aun es especial para mi… -el otro lo abrasaba de manera protectora, ¡al diablo con todo! ¿Que importaba que estuvieran en el piso, el con los pantalones abajo en una comprometedora posición? Ahí se encontraba él, siendo consolado, protegido.
No pudo más que devolverle el abrazo, con algo de timidez y susurrar con temor un nombre al oído del otro.
Estrecho el abrazo, no quería que se fuera, quería que se quedara junto a él, ahí, solos los dos sin nadie de que preocuparse. Lo abrazo con más fuerza temiendo la reacción del otro, temiendo el que se fuera a encara al otro. No quería que ninguno de los dos saliese lastimado, solo quería que ese asunto se enterrara en lo más profundo junto a él, donde nadie saliese lastimado.
-Ni… Nikita… Arlovski…
- Spoiler:
- siento mucho haber tardado tanto
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Sentía como suaves brisas frías empezaban a azotar el lugar, y con ello a ambos individuos tirados en la nada. Ya que realmente no sabía si sabría volver. Pero no debía quedarse más ahí, ya que el otro podría caer enfermo, y sus heridas infectarse. Y entonces toda su labor como héroe se iría al traste. Así que recordo que aún después de todo tenía que sacar al otro de allí como fuera, sin importar si tenía que pasar la noche en vela con el a las espaldas buscando el camino de vuelta al instituto. Pero aunque se muriera de ganas de poder seguir estando abrazandolo. Absorviendo aquel aroma propio que tenía el otro. Y realmente deseando devorarle la boca, hacer marcas el en su cuerpo para indicar que era suyo. Y el que hubiera hecho aquello se enterará de lo que era bueno. Debían irse.
Estaba molesto consigo mismo, por sentirse de aquella forma con él, quizás lo estuviera empezando a amar. No. Ni hablar. No se iba a atar a una persona. Y menos a un alumno. Un hombre. Un menor. Volvió a lo mismo. Aquel circulo vicioso del qu enunca escaparía, el cual se repetiría hasta el punto de llegar a volverse loco. Lo necesitaba pero no podía. ¿Podrían mantener una relación en secreto? ¿Una relación en secreto realmente era una relación? Ocultar a la gente la persona que amas, cuando el amor es un sentimiento puro, y hay que ocultarlo como si fuera un pecado. Además el alumno no lo amaba, y aunque fuera así, como héroe y como mayor, era el que debía tener los pies en el suelo. Aunque no fuera así la mayoría de veces.
El otro seguía igual de cabezota. ¡Maldita sea! Pero poco a poco veía que le otro perdía aquella coraza que ocultaba el nombre de aquella persona, una sola palabra. Podría hacer que el americano pudiera redirigir su ira en esa persona.
Sintió que le otro lo abrazaba y sonrió ligeramente sin soltarlo ni un segundo, como si de soltarlo pudiera caerse, aún estando ya en el suelo. Y cuando por fin iba a decirlo, el otro, nervioso, impaciente, desesperado, ansioso, espero aquel nombre notando como la presión ejercida del británico crecía.
Ni… Nikita… Arlovski…
Su cuerpo se congeló, se tensó, como si de piedra se tratará de pronto, con esas dos palabras en un susurró pudo hacer que todos sus musculos se helaran. Aquel sucio rector, maldito. Lo mataría lo….. De pronto no pudo aguantarlo y ocultó su rostro en el cuello del menor. No podía mirarlo a la cara. ¿Por qué se sentía culpable? Ambos no eran nada. Pero…pero… El americano había estado con el rector. Y encima en la sala de profesores. Y… sentía que su cuerpo podría partirse. No podía reprocharle nada a Nikita, no podía decirle que no lo hiciera, Porque el mismo lo hizó con él. Y acababa de recordar marcas de uñas clavadas en la espalda del americano debido al placer obtenido. Maldición. En el fondo quería matarlo por haberle hecho aquello, pero de lo contrario, el menor se enfadaría ya que decía que no quería que le hiciera nada.
Un momento
¿Había dicho lo que había oido?
¿Aún es especial para mi? Aquel sucio bastardo…¡¿Cómo se atrevía!? Es decir, se suponía que estaba con su hermano, y se lía con el hermano y con un alumno. ¡No tiene escrúpulos! Además…¿aquello quería decir que no sentía nada por el americano? ¡Claro, solo es su profesor!
Sintió una punzada en el pecho ante aquella idea para de pronto abrazarlo con más fuerza. No, no debía mostrarse afectado por aquello. Pero, los celos, le comieron, le consumieron, lo devoraron, y lo destrozaron. ¡Sólo debía amar al héroe! ¡Sólo A ÉL!
-No haré nada, I promise you…-susurró para de pronto soltarlo y subir los pantalones del otro, para de pronto cogerlo en brazos.
-Pero te aseguró que no te volverá a poner la mano encima-forzó una sonrisa.
Comenzó a andar para de pronto quedarse mirando el rostro del otro, mientras buscaba de reojo el camino hacia donde debía ir. No pudo aguantar más. Teniendolo en brazos como si de una novia en el día de su boda se tratará, encorvó su espalda ligeramente para robarle un beso. Sólo uno. Sólo…uno. Para, aún saber que el otro no lo amaba, para poder…saborear sus labios. Nada más sentir el roce de ambos labios, espero la reacción del otro. Aunque pudo sentir nada más acercarse el sabor a…¿Té?
Estaba molesto consigo mismo, por sentirse de aquella forma con él, quizás lo estuviera empezando a amar. No. Ni hablar. No se iba a atar a una persona. Y menos a un alumno. Un hombre. Un menor. Volvió a lo mismo. Aquel circulo vicioso del qu enunca escaparía, el cual se repetiría hasta el punto de llegar a volverse loco. Lo necesitaba pero no podía. ¿Podrían mantener una relación en secreto? ¿Una relación en secreto realmente era una relación? Ocultar a la gente la persona que amas, cuando el amor es un sentimiento puro, y hay que ocultarlo como si fuera un pecado. Además el alumno no lo amaba, y aunque fuera así, como héroe y como mayor, era el que debía tener los pies en el suelo. Aunque no fuera así la mayoría de veces.
El otro seguía igual de cabezota. ¡Maldita sea! Pero poco a poco veía que le otro perdía aquella coraza que ocultaba el nombre de aquella persona, una sola palabra. Podría hacer que el americano pudiera redirigir su ira en esa persona.
Sintió que le otro lo abrazaba y sonrió ligeramente sin soltarlo ni un segundo, como si de soltarlo pudiera caerse, aún estando ya en el suelo. Y cuando por fin iba a decirlo, el otro, nervioso, impaciente, desesperado, ansioso, espero aquel nombre notando como la presión ejercida del británico crecía.
Ni… Nikita… Arlovski…
Su cuerpo se congeló, se tensó, como si de piedra se tratará de pronto, con esas dos palabras en un susurró pudo hacer que todos sus musculos se helaran. Aquel sucio rector, maldito. Lo mataría lo….. De pronto no pudo aguantarlo y ocultó su rostro en el cuello del menor. No podía mirarlo a la cara. ¿Por qué se sentía culpable? Ambos no eran nada. Pero…pero… El americano había estado con el rector. Y encima en la sala de profesores. Y… sentía que su cuerpo podría partirse. No podía reprocharle nada a Nikita, no podía decirle que no lo hiciera, Porque el mismo lo hizó con él. Y acababa de recordar marcas de uñas clavadas en la espalda del americano debido al placer obtenido. Maldición. En el fondo quería matarlo por haberle hecho aquello, pero de lo contrario, el menor se enfadaría ya que decía que no quería que le hiciera nada.
Un momento
¿Había dicho lo que había oido?
¿Aún es especial para mi? Aquel sucio bastardo…¡¿Cómo se atrevía!? Es decir, se suponía que estaba con su hermano, y se lía con el hermano y con un alumno. ¡No tiene escrúpulos! Además…¿aquello quería decir que no sentía nada por el americano? ¡Claro, solo es su profesor!
Sintió una punzada en el pecho ante aquella idea para de pronto abrazarlo con más fuerza. No, no debía mostrarse afectado por aquello. Pero, los celos, le comieron, le consumieron, lo devoraron, y lo destrozaron. ¡Sólo debía amar al héroe! ¡Sólo A ÉL!
-No haré nada, I promise you…-susurró para de pronto soltarlo y subir los pantalones del otro, para de pronto cogerlo en brazos.
-Pero te aseguró que no te volverá a poner la mano encima-forzó una sonrisa.
Comenzó a andar para de pronto quedarse mirando el rostro del otro, mientras buscaba de reojo el camino hacia donde debía ir. No pudo aguantar más. Teniendolo en brazos como si de una novia en el día de su boda se tratará, encorvó su espalda ligeramente para robarle un beso. Sólo uno. Sólo…uno. Para, aún saber que el otro no lo amaba, para poder…saborear sus labios. Nada más sentir el roce de ambos labios, espero la reacción del otro. Aunque pudo sentir nada más acercarse el sabor a…¿Té?
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Lo habia dicho, lo habia dicho, ¡Rayos! ¿Porqué lo hiso? Se dejó llevar por el momento por la calides del otro, por la mirada del otro... Simplemente se dejo llevar por él.
¿Qué iba a hacer? Solo esperaba que el otro cumpliera con lo que habia dicho, no queria causarle problemas al rector ni mucho menos a su profesor... un momento, desde cuando se había convertido en algo suyo, ¡Rayos! pero aun asi no queria que el maestro saliera perjudicado.
Sintió la respiración del otro en su cuello, le susurraba que lo protegería y que no le haria nada, por lo que se relajó y decidió confiar en sus palabras.
Disfrutaba de la cercanía de sus cuerpos, era cálido y reconfortante, no como cuando estaba con Nikita. Estando con él se sentía realmente completo y a salvo.
Sintio un vacio frio cuando el otro se alejo de él, realmente se encontraba a gusto, pero no podían seguir de esa manera. Su corazon pego un salto y no pudo evitar soltar un quejido y sonrojarce cuando el otro lo levanto y subio sus pantalones para luego tomarlo en brazos tipo princesa.
Iba a protestar ante tal acto, pero recordó que en las condiciones en las que se encontraba le era casi imposible caminar.
-Gra-gracias ... -se guardo sus insultos para soltar un tímido agradecimiento algo ruborizado. Sintío la intensa mirada del otro sobre él asi que se giro para encararlo.
-¿Qué te pa- pero fue abruptamente callado por los suaves y cálidos labios del mayor. ¿Q-qué hacía, como se atrevía? Hizo el ademán de resistirce, pero no pudo. Algo le insitaba a seguir, tal vez el embriagante aroma del mayor o la dulsura con la que lo besaba. Sentía un torbellino de emociones en su pecho ¿Qué era eso? ¿Poqué? Se sentía confundido sin saber que hacer. Por un lado estaba Nikita, la única persona que le daba algo e carño y por otro lado estaban lo nacientes sentimientos por el profesor. Degusto los cálios labios de mayor sintiendo el amargo sabor del café.
¿Qué iba a hacer? Solo esperaba que el otro cumpliera con lo que habia dicho, no queria causarle problemas al rector ni mucho menos a su profesor... un momento, desde cuando se había convertido en algo suyo, ¡Rayos! pero aun asi no queria que el maestro saliera perjudicado.
Sintió la respiración del otro en su cuello, le susurraba que lo protegería y que no le haria nada, por lo que se relajó y decidió confiar en sus palabras.
Disfrutaba de la cercanía de sus cuerpos, era cálido y reconfortante, no como cuando estaba con Nikita. Estando con él se sentía realmente completo y a salvo.
Sintio un vacio frio cuando el otro se alejo de él, realmente se encontraba a gusto, pero no podían seguir de esa manera. Su corazon pego un salto y no pudo evitar soltar un quejido y sonrojarce cuando el otro lo levanto y subio sus pantalones para luego tomarlo en brazos tipo princesa.
Iba a protestar ante tal acto, pero recordó que en las condiciones en las que se encontraba le era casi imposible caminar.
-Gra-gracias ... -se guardo sus insultos para soltar un tímido agradecimiento algo ruborizado. Sintío la intensa mirada del otro sobre él asi que se giro para encararlo.
-¿Qué te pa- pero fue abruptamente callado por los suaves y cálidos labios del mayor. ¿Q-qué hacía, como se atrevía? Hizo el ademán de resistirce, pero no pudo. Algo le insitaba a seguir, tal vez el embriagante aroma del mayor o la dulsura con la que lo besaba. Sentía un torbellino de emociones en su pecho ¿Qué era eso? ¿Poqué? Se sentía confundido sin saber que hacer. Por un lado estaba Nikita, la única persona que le daba algo e carño y por otro lado estaban lo nacientes sentimientos por el profesor. Degusto los cálios labios de mayor sintiendo el amargo sabor del café.
Arthur Kirkland- Admin
- Mensajes : 341
Fecha de inscripción : 09/03/2011
Re: Relajado (Privado Arthur)
Aquel momento le parecia tan cursi y empalagoso que seguramente tendría dolores de barriga y caries todo el día después de aquello. Sabía que no debía, era un alumno, no podía mirarlo con otro ojos. Pero Nikita podía estar con su hermnao que también era alumno y menor. ¿Se le haría a él también una expeción si estuviera con aquel de ojos más hermosos del mundo? ¿Podría pedirle a Nikita que le dejará estar con él? ¿Podría...?
No.
No podía subestimarse, infravalorarse tanto cmo para humillarse y ridiculizarse pidiendole un favor a alguien como él. Debía aguantar, además seguramente como ambos se odiaban no le daría el placer de dejarle ser feliz, seguramente se lo echaría en cara, lo humillaría, torturaría, y lo peor de todo, como expulsará o pusiera de nuevo una mano a Arthur defintivamente el héroe sería capaz de cortarsela.
¿Y una relación secreta? Parecerían tan adolescentes y alocados ambos, pero la idea podría funcionar, al menos temporalmente, hasta a que el gran héroe se leo ocurriera una idea mejor para poder estar ambos sin tener que esconderse como si fueran villanos.
-No debes darlas-susurro al escuchar aquel agradecimiento.
Realmente el otro tenía muy mala leche, pero en momentos así se veía tan dulce, tan lindo, tan....incitante. Negó con la cabeza repetidas veces. ¡NO! No solo buscaba sexo en él, lo amaba, no debía mirarlo con ojos malos. Odiaba aquella faceta afrancesada que se mostraba en cierta gente.
El americano lo quería de verdad no era simplemente por sexo ni nada parecido, realmente quería estar con él, ayudarlo, y que lo primero que viera al despertar cada mañana fueran aquellos ojos. Oh shit, aquello sonaba tan cursi, tan….dulce que creyo que realmente si que era demasiado romántico, aunque solo de vez en cuando y exclusivamente con aquel inglés, pero jamás aunque lo pensará se lo diría,seguramente se snetiría ridiculo de decir semejante cosa. Como si él fuera una chica y adorara ese tipo de cosas o dios sabe qué.
En fin. Simplemente deseo que después de aquel beso no le pegará, insultará, llorará o o le tuviera miedo, es dcir, cualquier reacción negativa. Ya que de ser así seguramente ya podría el héroe morirse de pura vergüenza. Pero no fue así, corto la frase del otro y aquel tardo un poco en corresponder, cosa que nunca admitirá el americano pero le asustó realmente, pero seguidamente por fin correspondió.Las manos que sostenian el cuerpo ajeno lo apretaron con fuerza contra él, como si fuera el objeto más frágil del mundo para seguidamente separarse y mirarlo fijamente. Se mordió el labio inferior con una sonrisa tonta tipica del rubio.
-I love you…but this have to is a secret-susurro en un hilo de voz para de pronto volver a besarlo sin darle tiempo a hablar temiendo la reacción o respuesta del otro.
No.
No podía subestimarse, infravalorarse tanto cmo para humillarse y ridiculizarse pidiendole un favor a alguien como él. Debía aguantar, además seguramente como ambos se odiaban no le daría el placer de dejarle ser feliz, seguramente se lo echaría en cara, lo humillaría, torturaría, y lo peor de todo, como expulsará o pusiera de nuevo una mano a Arthur defintivamente el héroe sería capaz de cortarsela.
¿Y una relación secreta? Parecerían tan adolescentes y alocados ambos, pero la idea podría funcionar, al menos temporalmente, hasta a que el gran héroe se leo ocurriera una idea mejor para poder estar ambos sin tener que esconderse como si fueran villanos.
-No debes darlas-susurro al escuchar aquel agradecimiento.
Realmente el otro tenía muy mala leche, pero en momentos así se veía tan dulce, tan lindo, tan....incitante. Negó con la cabeza repetidas veces. ¡NO! No solo buscaba sexo en él, lo amaba, no debía mirarlo con ojos malos. Odiaba aquella faceta
El americano lo quería de verdad no era simplemente por sexo ni nada parecido, realmente quería estar con él, ayudarlo, y que lo primero que viera al despertar cada mañana fueran aquellos ojos. Oh shit, aquello sonaba tan cursi, tan….dulce que creyo que realmente si que era demasiado romántico, aunque solo de vez en cuando y exclusivamente con aquel inglés, pero jamás aunque lo pensará se lo diría,seguramente se snetiría ridiculo de decir semejante cosa. Como si él fuera una chica y adorara ese tipo de cosas o dios sabe qué.
En fin. Simplemente deseo que después de aquel beso no le pegará, insultará, llorará o o le tuviera miedo, es dcir, cualquier reacción negativa. Ya que de ser así seguramente ya podría el héroe morirse de pura vergüenza. Pero no fue así, corto la frase del otro y aquel tardo un poco en corresponder, cosa que nunca admitirá el americano pero le asustó realmente, pero seguidamente por fin correspondió.Las manos que sostenian el cuerpo ajeno lo apretaron con fuerza contra él, como si fuera el objeto más frágil del mundo para seguidamente separarse y mirarlo fijamente. Se mordió el labio inferior con una sonrisa tonta tipica del rubio.
-I love you…but this have to is a secret-susurro en un hilo de voz para de pronto volver a besarlo sin darle tiempo a hablar temiendo la reacción o respuesta del otro.
Alfred F. Jones- Mensajes : 123
Fecha de inscripción : 14/03/2011
Temas similares
» confesion (privado arthur)
» Entre lirios y rosas [Privado - Arthur Kirkland]
» Magical Discovery [Arthur]
» Ficha de Arthur Kirkland / Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte
» Perdido [Privado Berwald]
» Entre lirios y rosas [Privado - Arthur Kirkland]
» Magical Discovery [Arthur]
» Ficha de Arthur Kirkland / Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte
» Perdido [Privado Berwald]
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Mar Ene 03, 2012 11:02 am por sakura honda
» una pequeña duda.....
Lun Sep 26, 2011 8:20 pm por Chibi!Berwald
» El ultimo que postea gana
Vie Ago 19, 2011 1:51 pm por Alice Kirkland
» •••The Queen Is Here! (?)[Ficha NyoIggirisu!]
Miér Ago 17, 2011 11:00 am por Nikita Arlovski
» Inscripción de Dormitorios
Mar Ago 16, 2011 9:37 pm por Alice Kirkland
» los personajes
Miér Ago 10, 2011 3:09 pm por Nikita Arlovski
» En Rusia sovietica...
Vie Ago 05, 2011 5:46 pm por Alice Kirkland
» Queja, con amor~
Mar Ago 02, 2011 3:37 pm por Katariina Väinamöinen
» ausencia... -suspiro-
Vie Jul 22, 2011 11:15 am por Katariina Väinamöinen