confesion (privado arthur)

Lo que iba a hacer dentro de 5 minutos seria muy vergonzoso pero lo hecho esta hecho y no había vuelta atrás, le va a costar mucho pero eso era lo de menos si no se quitaba el peso de enzima no la iba a pasar muy bien el resto del año, siempre es mejor hacer las cosas antes que después. Pero las dudas la carcomían por dentro ¿Qué iría a hacer si le daban calabazas? Pues seria el peor momento de su vida y lo mejor seria ¿Qué dejara la escuela? No si pasara aquello seguiría con su vida aunque doliese mucho.
La tímida chica caminaba entre el bosque de la escuela, siempre le había parecido muy tranquilo así que era el mejor lugar para descansar claro, para lo que ella opinaba, y también el mejor lugar para la ocasión. Se sentó despacio debajo de un árbol a esperar con un termo con te y algunos aperitivos de su país natal que esperaba que fueran del gusto apropiado de su acompañante. Estaba mas sonrojada que nunca en su vida, jamás se había declarado a nadie y jamás pensaba que lo haría, lo único que esperaba era que su nii san estuviera de acuerdo con ello, no esperaba que la persona con quien se iba a ver tuviera los mismos sentimiento que tiene ella hacia el.
No era hace mucho tiempo desde que le empezó a gustar, tal ves era mas admiración de su decisión, prolijidad y forma de ser tan directo e impulsivo lo cual ella misma se admitía que jamás seria, pero no se podía negar que sentía algo fuerte. No le había hablado muchas veces pero cuando si siempre fue muy amable y generoso. Además no era solo por su personalidad también su aspecto físico: ojos verdes, pelo rubio dorado liso y corto, se encontraba en buen estado físico (?). si desde hacia un rato que había sentido un gran afecto por Arthur Kirkland y no se podía negar, no sabe donde consiguió tener el valor de haberle puesto una nota en su bolso diciéndole que la encontrase a la tarde en el bosque para tomar el te ya que sabia que como todo ingles le encantaba la bebida.
Y bueno ahora solo habia que esperar.

Se encontraba en el bosque, realmente odiaba ese lugar, le traía muy malos recuerdos. Hay fue donde su vida se había ido a la mierda, pero eso ya no importaba. Siempre había estado solo, ahora podría perfectamente seguir adelante sin nadie.

Mientras caminaba entre los arboles podía reconocer algunos lugares y recordar los felices momentos que paso ahí. Agitó un poco la cabeza, eso estaba en el pasado y debía quedarse ahí, en lo más profundo y oscuro de su corazón.

Se encontraba ahí debido a una nota que había encontrado en su bolso proveniente de mm... Sakura Honda, no conocía muy bien a esa chica, de las fugaces conversaciones que tenían podía concluir que era una chica muy tímida y amable, le había pedido que se juntaran en el bosque para tomar el té. Lugar bastante singular para realizar tal cosa, pero supuso que era por su cultura o algo así.

Siguió su camino para luego encontrarse con la castaña de cortos cabellos sentada bajo un árbol posiblemente esperándolo.

-Buenas Tardes -saludo cordialmente a la chica mientras se acercaba a ella.-Siento mucho si te hice esperar, pero tu nota realmente me tomo desprevenido.

su llegada la tomo de desprevenida la muchacha ya estaba con un poco de sueño y algo de angustia.cuando lo vio llegar su corazón empezó a latir fuertemente y fue inevitable el futuro sonrojo.logro contestar como pudo, pero ante todo lo primero que hizo fue el común saludo de su pueblo natal.

- ¡ah! no, no te disculpes es culpa miá tendría que haber avisado con mas tiempo, ademas no importa el simple hecho de que este aquí me hace muy feliz,-

en ese momento se da cuenta de que ha hablado un poco de mas.

-e, eto lo que quería eh yo...-era muy obvio que se encontraba en un momento de vergüenza, jamas le había pasado algo así, usualmente si le gustaba alguien simplemente se lo guardaba pero, esta ves era distinto.
la joven se dio cuenta de que el ingles seguía parado.

-eh mm, por favor siéntate, te gustaría tomar un poco de te y algo de comer- expresa con una sonrisa tímida.

Era una agradable tarde, las brisas de otoño arrastraban por el aire las hojas caídas y amarillas, símbolo del fin de su etapa, haciéndolas revolotear por todos lados. Cuando el clima estaba asi le gustaba acostarse temprano con un buen libro y una deliciosa taza de té. Pero en cambio ahí se encontraba, en medio del bosque, admirando como los cabellos de la chica se mecían gracílmente por acción de la brisa.

-¿He? No te preocupes, no hay problema. Es mi deber como presidente del concejo ateneder las necesidades de los alumnos. Además no podría dejar a una dama aquí sola esperando. Como minimo debía asistir. –se acercó a la chica brindandole una amable sonrisa con el fin de tranquilizarla ya que se veía notoriamente nerviosa, no era necesario que agradeciera tanto el hecho de que asistiese, es lo mínimo que podía hacer como el caballero que era.

-Claro, muchas gracias por su invitación –se acomodo al frente a la chica aun preguntandose el porque del lugar tan poco convencional de la invitación. Tal vez fuese por su cultura o para apreciar la caída de las hojas otoñales aprovechando que el clima aun era agradable.

-Y bueno, supongo que no me citaste aquí solo a tomar el té ¿Verdad? –podía ser caballeroso, amable pero cuando algo le intrigaba el tacto no era algo de lo que podría alardear. Dio un sorbo al té y dirigió su mirada a la oriental en espera de una respuesta.

- A,ah! s,si tiene razón-el hecho de que sus preciosos ojos color verde esmeralda la miraran directamente hacia que la joven sintiera que en cualquier momento se iba a desmoronar, así que prefirió dirigir su mirada a otro lado salvándose del esfuerzo de no desmayarse del nivel de calor que subía de su cabeza.Se congelo, ahora, ¿Como iba a hacer para decirle? Por una parte se olvido completamente de su parte tímida. y su subconsciente le ordeno :

" gambare! sakura tu puedes, solo dilo, nada malo podría pasar ¿no?"

Así que lo decidió, lo iba a hacer ahora mismo, 1, 2, 3, 4, y.....
Se giro rápidamente y pronuncio las palabras que pensaba que nunca irían a salir de su boca:

- e, e, eto.......y, yo q,quería decirle q,que megustamuchisimoseñorkirkland!- en eso de terminar su oración se callo con completo silencio y se quedo quieta, mientras arriba de ella caía una pequeña hoja de otoño......