necesito un descanso.... (Naty - Niki - Mattie... privado)

Las cosas estaban de mal a peor, la carga académica que me obligaba a buscarle una solución a cualquier problema que se presentara en el establecimiento, mis propios problemas sentimentales y los que también yo mismo me hacia peleándome con medio mundo… me estaban afectando mas de lo que yo mismo podía soportar… cuanto mas duraría si seguía a ese ritmo, casi sin dormir siempre resfriado y pasando mas de un mal rato que yo mismo había provocado…

Luego de ni ultimo conflicto en el cual, no estando seguro de esto pero creo haber sido el que salio mas mal herido, quizás no física pero psicológicamente ya no di más y a pesar de odiar ir a ver a cualquier medico fui a ver a mi hermana, esperando que me diera un consuelo, o alguna medicina milagrosa que acabara de una vez por todas con todo mi stress… si estaba pidiendo un milagro…

Golpee la puerta de la enfermería bastante desanimado, quería que mi hermana me atendiera… si eso, lo que jamás había necesitado antes… quería un descanso – Naty soy yo puedo pasar – le dije en voz baja esperando que abriera la puerta.

Aspirina…tè de manzanilla…-ordenaba los medicamentos por orden de uso cuando escucho la fría voz de su Nikita-Eso no se pregunta, la enfermería debe estar abierta en cualquier momento para el que lo necesite y más aun si es mi querido Brat -respondió a secas mientras abría la puerta ofreciéndole una silla-toma asiento por favor.

Su gemelo no era muy expresivo pero ahora había algo que no le gustaba, un aura de cansancio, de pesadumbre-Si estas aquí es por que algo te pasa, eso si, no tenemos antídoto para las penas de amor excepto esto…-abrió un cajón del escritorio y saco una botella de vodka con toda confianza-¿o prefieres un tè?

Entre y me acomode, tras lo que dijo ella le sonreí pesadamente y asentí a lo de tomar vodka por que yo mismo sabia que no habría cura a mi mal – nee no quiero té, el vodka esta bien - le dije esperando que ella me ayudare en lo que fuera, menos en un suicidio que sabia muy bien estaría dentro de las opciones que ella me daría a este mal.

- Nee hermana quisiera que me revisaras es que no me siento bien… ya estoy cansado de todo – le dije sinceramente tomando algo de la licor, sabiendo que esa no era la respuesta que necesitaba.
- estuve apunto de renunciar e irme a casa, ya no aguanto – agregue al final intentando de darme ánimos aun a mi mismo sabiendo que esto no podía continuar así.

Esperaba que le llamara la atención por tener otra botella de alcohol además de la que se usa para las heridas pero tampoco iba negarle lo ofrecido, después de todo los alumnos preferían cojear al hospital del pueblo antes que atenderse en la enfermería, sobretodo ciertos rusos….

2 vasos de tamaño considerable se llenaban y vaciaban de vodka a un ritmo preocupante -Con que te sientes mal…- dijo antes de tragarse el liquido como si fuera simple agua -Me sorprende ,considerando que la pasas tan bien- levanto y bajo las cejas mientras apuntaba a la cámara de seguridad -Pero entiendo que te sientas cansado, estar a cargo de un colegio no es fácil y mas aun si le añades la carga sentimental-dejo de apretar al pobre contenedor para aprovechar de llenarlo junto al de su hermano -No te aconsejo que huyas de los problemas pero si que te tomes un tiempo para relajarte y así poder verlos de forma mas clara.

La escuche tomando con desmedida el alcohol que ella me ofrecía, estaba demasiado mal en todos los sentidos pero no podía hacer lo que ella me decía… yo no era un cobarde que salía huyendo a la primera aun que tuviera muriendo no lo aria, pero eso no evitaba que yo colapsara.

-Niet, hermano no puedo hacer eso – le dije quitándole la botella y sirviéndome lo que quedaba con muchas ganas de mas – ya no puedo con esto… pensé que podría, me siento encajonado… como un ratón ante muchos gatos – tome de golpe lo que tenia en el vaso como si fuera agua.

La mire y le sonreí dulcemente – Nee tienes otra botella de Vodka? – le pregunte casi rogándole, acaso era la única forma en la que yo podía olvidarme de las cosas, bueno si… siempre hacia lo mismo y lo único que sacaba era una linda resaca.

Dudo si cumplir su petición, no solo por que las resacas de Nikita llegaban a niveles legendarios…y sus mañas también, si no también por que el vodka no era nada barato y al parecer el bar dejo de venderlo por temor a los desastres que traían las borracheras soviéticas, bueno, ellos se perdían la fortuna que ganarían si vendieran el vodka por barril, pero quizás si le seguía sirviendo ese maldito orgullo se adormecería y dispararía los problemas que lo aquejaban. Además, no era muy bien visto que una enfermera guardara su “mamadera” en el mismo refrigerador que las insulinas.

-Tengo varias-se levanto a sacar con cuidado unos 6 botellones del refrigerador para ponerlos en la mesa -y son solo para ti…uy!-fue a cerrar la puerta de la enfermería tambaleándose a tropezones, el vodka y los tacos altos no eran muy buena combinación-por que no pienso invitar a nadie mas-se quedo pegada en la puerta unos segundos para después sacarse los tacos maldiciéndolos en todos los insultos posibles,de pronto se quedo pensando un rato y miro curiosa a su hermano-….¿o tu querías invitar a alguien?-

Estaba deprimido y prefería la borrachera en este momento… y si aun que supiera bien como me ponía cuando se me pasaba el efecto del alcohol ya era algo de costumbre que tenia de pequeño beber hasta no acordarme de nada… siempre me enseñaron a beber mucho vodka con mis hermanos aun que era raro en mi no regañar a mi Zarina por tener guardado vodka en la enfermería y aun mas ¿por qué ella estaba bebiendo?, las damas no deberían hacerlo pero bueno ya no era una cosa que en ese momento me molestara mucho.

La vi poner las botellas sobre la mesa y tome una de inmediato y me serví en el baso tomándomelo de golpe, luego ella fue a serrar la puerta y me pregunto si invitaría a alguien… a quien iba a invitar, a Mattie.. a los gerentes del colegio a mi jefe a ver si me daba mas tiempo para hacer mi trabajo… me sentía aprisionado, me tite la corbata ya que me sentía ahogado por esta y la deje a un lado…- Niet.. a nadie – bebí otro poco de golpe.

Suspire profundamente esperando que se sentara de nuevo, mi expresión no cambiaba y menos mi orgullo se iba de ahí, solo quería beber como siempre hasta olvidar de existencia del mundo… solo quería desaparecer pero no se lo diría a ella ni a nadie solo quería que ella me acompañara un poco en este momento.

Que bien, así duraran más-se dirigió tambaleante a su asiento, la falta de equilibrio le advirtió que tenia que dejar la botella si quería saber los secretos de su hermano y tener un par de tragos para mañana. Al ver a su Brat frente a ella ni el alcohol pudo embellecer la avergonzante imagen del borracho que ahoga sus penas, la necesidad de entregarse a aquel liquido para callarlo todo era algo que por desgracia era tipico de Nikita.

-Bueno, si crees que la resaca te va a curar…-Su corazón se llenaba de culpa como el vaso de vodka ¿pero que podía hacer?, ¿Negárselo todo sin poder ayudarlo en nada?, unos tragos mas, un par de vasos y ese orgullo se ahogaría junto con su pena.

Intentaba no ponerle atención a nada solo quería beber, beber hasta olvidarme de mi mismo sin dejar de mirar a la nada serio servia una y otra vez aquel liquido que me mareaba cada vez mas, unas lagrimas cayeron por mis mejillas cuando la escuche decir lo ultimo, no la resaca solo me molestaría un poco pero no me curaría… por que no podía curar aquello que me oprimía el pecho, no lo se, pero necesitaba seguir con esto o eso pensaba yo.

- Déjame… - le dije tomando de golpe todo el liquido que estaba en el vaso, para luego dejarme caer en el escritorio alejándolo y hundiendo mi rostro entre mis brazos para que ella no me mirara. Me sentía un desastre, un estropajo viejo.

- me duele mucho… no aguanto más… - dije casi en un sollozo, que mas da es mi hermana no se enojaría por verme así… menos ahora que la necesitaba más que nunca. –Nadie puede querer a una basura como yo – dije para finalizar en un tono tan bajo que quizás ni siquiera le había escuchado.

Eso si que no lo aguanto…

Fue un murmuro, una palabra mas contaminando el aire pero para ella fue como si le hubieran pegado un balazo, ni el alcohol ni el amor pudieron detener la orden que su corazón mando a su cerebro y que se disponían a cumplir sus manos.

-¡No vuelvas a decir eso en mi presencia!-chillo iracunda mientras una mano mostraba la cara de Nikita y la otra le daba una fuerte cachetada que lo tiro al suelo -¡¿tu crees que no me duele verte así, que esto es para la risa?!- se abalanzo a tomar del cuello a su hermano sin ahorcarlo mientras lo miraba fijamente con una cara digna de un demonio - Tu…, borrachín, me vas a decir que mierda te pasa y lo que sea que es lo voy a solucionar, como sea , pero lo hare, para que no se te olvide nunca ,pero NUNCA!....-

Su voz se rompió y las lagrimas se desbordaron en sollozos, su rostro se acerco al oído del otro para recordarle:

-…que yo soy tu siostra y siempre te voy a querer-

Estaba hundido ahí en mi estupidez y ya borrachera cuando escuche a mi hermana chilla molesta y derepente tomo mi cara y de una bofetada me tiro al suelo, en un primer momento no reaccione a nada solo la miraba muy sorprendido dejando hacer unas lagrimas llevándome al rostro una mano por que sentía como comenzaba a hincharse por el golpe, en ese momento ella comenzó a regañarme como nunca lo había hecho tomándome del cuello, yo solo no reaccionaba a nada solo la escuchaba sin hacer nada aun en estado de shock.

- yo… - lo único que atine en ese momento tras su pregunta y lo que me dijo al oído fue a abrazarla sentándola en mis piernas, no me gustaba verla llorar, no ella no debía llorar ella es una princesa es mi zarina, y era mi culpa que ella estuviera triste, no debí ir a la enfermería pero ya era tarde – tra-tranquila no llores por favor, todo esta bien – le dije solo para calmarla por que antes que yo siempre esta ella y su seguridad.

- n-no quiero que llores por mi culpa… - comienza a sentirse aun mas mal, pero ahora que importaban los demás problemas, lo que le preocupaba era ella su hermanita.
Cada momento la mejilla le dolía más, y la marca roja dejara por el golpe de la mano de la muchacha en su cara, comenzaba a hacerse muy notoria al tener los dedos de ella marcados.

No se había sentido muy bien lo últimos días. Estaba casi sin voz y necesitaba que lo vieran para ver que no fuese muy grave... Por si fuera poco, también se había cortado con la tijera, cuando ya estaba terminando de cortar un poco su cabello, ya que tapaba sus ojos y le molestaba mucho.
Caminó a la enfermería, ya demasiado preocupado por no poder hablar. Se sentía mal y todo le dolía. Ya acostumbraba a que nadie lo escuchara, pero ahora ni el mismo se podía sentir.
Golpeo varias veces la puerta, intentando que alguien lo atendiera, como no tuvo respuesta, abrió la puerta viendo la escena, a lo que se quedó paralizado. En silencio.
¿Qué era lo que pasaba? Se acercó a ellos, pero no mucho.

-Señor Arlovski...? Señorita Arlovskaya?-

Susurró lo más alto que su voz rota le dejó, aunque no estaba seguro de que lo hayan escuchado.

Si había algo que odiaba, era llorar, fuera la razón que fuera, detestaba esa pesadumbre que le traían las lagrimas sobretodo por ser algo que no lo podía controlar y que consideraba inútil, ella no era de las que se quebraba fácilmente ,pero el tiempo y la ira se acumula y la estupidez de Nikita había sido la gota que rebaso el vaso.

-Entonces deja de decir estupideces como esa…- murmuro aun con la cabeza en su hombro.

Ahí estaba, como una niñita pequeña sentada en las piernas de su hermano mientras sollozaba y lo abrazaba, ¿hace cuanto que no estaban así?, ¿meses?, ¿años?, quien sabe , los 2 eran unos fríos témpanos que no solían demostrar afecto, pero eso no quería decir que no lo necesitaran, es mas ,ahora mismo sentía que necesitaba ese abrazo mas que nadie,¿Qué importaba si los veian?,eran hermanos y la puerta estaba cerrad…

….¿Quien abrió la puerta?

La entrada estaba abierta de par en par con solo el aire parado ahí, sin embargo una voz preguntona advirtió una presencia .Rápidamente su mano acogió 5 cuchillos entre sus dedos para apuntarlos alrededor.

-Quien este acá, fantasma o humano, identifíquese A-HO-RA.

El alcohol en la sangre me hacia sentirme aun mas mal tras las lagrimas de mi amada hermana, soy una maldita basura que solo logra hacer sentir mal y hacer llorar a quienes intenta querer o amar.

Le acaricie el cabello acurrucándola en mi pecho esperando hacer que se sintiera mejor, era lo único que me importaba, quería que me regañara o que me volviera a golpear pero que no siguiera llorando…

- Esta bien – le respondí para hacerla sentí mejor, la cara me dolía y sentía como latía el lugar donde ella había depositado la bofetada, aun así la acogía intentando no poderle atención al dolor, la quería mucho y desde hace un tiempo había dejado de ser tan frío e incluso había intentado ser mas calido desde que intentaba tener de pareja Al joven americano que le había cautivado… mientras estabas así los dos la puerta se abrió y ella reacción de mala manera apuntando a todos lados con sus cuchillos, la mire y le tome la mano para que no le amenazara – Es mi novio Mattie – le dije bajando la cabeza para que este no notara que estaba llorando y aun mas intentando ocultar la bofetada que mi hermanita hermosa me había dado.

- Necesitas algo Mattie - sin levantarse del suelo en el que estaba con su hermana, las botellas casi vacías sobre el escritorio y mi copa tirada en el suelo muy cerca de donde estaba sentado.